Suecia es ese país en el que me hubiera gustado pasar algún tiempo disfrutando de sus paisajes y por supuesto de su música. Desde allí no paramos de recibir grandes proyectos musicales y la última joya de la corona sueca se llama Winding Road, no voy a entretener a nadie con los nombre de los componentes de la banda ni con las bandas por las que hayan pasado antes, voy a tratar de ser conciso y explicar lo que me parece este disco. Un disco que despliega todo un repertorio de canciones con el brillo, la melodía, la producción y la destreza musical de unos artistas esplendidos.
AOR Heaven ha apostado por este magnifico producto made in Sweden total, estribillos pegadizos muy bien construidos, teclados que marcan melodías claras y concisas, guitarras equilibradas, una sección rítmica bien conjuntada y una voz magnifica. Si esos no son elementos para que un disco te guste ya puedes dejar de leer en caso contrario busca este disco como sea porque este es uno de tus CD de cabecera del año.
Un disco que comienza con un tema como «It´s A Matter Of Survival» ya deja claro que apuesta por un estilo muy determinado, una banda muy bien acoplada interpreta uno tras otros auténticos himnos AOR. Una perfecta coordinación de todos los elementos consigue un balance musical fantástico. Una canción que sin parecerse a nadie recuerda a todos.
En «Summertime» nos paseamos a ritmo en un riff acoplado de teclado y guitarra en una onda ultra americana, un tema que podía haber aparecido con toda dignidad en cualquier película de aquellas de serie B que no valía un chavo pero que nos hacía disfrutar como enanos con una banda sonora brutal.
«Call On Me» tiene un ritmo muy Toto para pasar a un estribillo muy típico de bandas AOR, el teclado se mantiene siempre muy juguetón mientras las voces y los coros están sobresalientes, el solo de guitarra es más que preciso, temazo!
La balada lacrimógena está estupendamente representada en «I Lost You» con algún ramalazo muy cercano a Europe, el vocalista me recuerda aquí al más dulce Joey Tempest mientras el teclado me retrae al sonido de Asia.
Medio tiempo con elegancia y buen sabor es «Out Of Control», una canción que podía haber cantando perfectamente John Payne, con una parte de estribillo muy fácil de recordar y entonar ojala en algún concierto de la banda.
El sonido ochentas está omnipresente en «Stranger In The Night», un tratamiento de guitarras y teclados muy clásico del estilo musical en cuestión interpretado sin concesión alguna al aburrimiento.
Para «Take Me As I Am» vuelven a adentrarnos en la balada clásica, el vocalista entona de manera muy especial con deje un tanto bluesy, una balada con una guitarra muy llena de sentimiento si bien el tempo lo marca el teclado junto a la sección de ritmo.
Ritmo potente de inicio para pasar a ritmo de crucero nos ofrece «On My Own Again», todos los recursos vocales de Jonas Tyshagen (tenía que decir su nombre!!) junto a un equilibrado solo de guitarra.
«Shooting Star» es un tema que me ha gustado mucho porque no encuentro casi nada que me recuerde a nadie, un tema con un toque muy personal, AOR muy clásico pero muy bien estructurado, con un órgano escondido entre teclados cargados de melodía y coros a saco.
El momento más hard rockero del disco llega con «Gotta Get Close To You», cercano a un sonido Rainbow de la era más melódica, el órgano toma un papel importante en el tema mientras las cuerdas vocales de Jonas llegan a tonos altos con suma facilidad, estupendo el momento central del tema donde las guitarras y el órgano mantienen una lucha frenética.
Con «Before It All Falls Down» nos acercamos al final del disco, una nueva balada creada para el lucimiento de Jonas, con un sonido que solo saben recrear las bandas de scandiAOR, armonías vocales de lujo muy marcadas por el acompañamiento de los teclados de Magnus Akerlund rematado todo con un solo como los que se marcaba Frankie Sullivan de Survivor acabado en ad lib.
Despide el disco «We Can Run Away» con un ritmo rápido, con una batería que suena estupenda, la voz está a un nivel soberbio y me parece un final tremendo para redondear un disco donde todo roza el sobresaliente alto.
No hay temas de relleno, las composiciones son geniales y el disco es una autentica delicia de escucha prolongada, de camino sinuoso nada de nada, tal vez ha sido un sinuoso camino poder llegar a terminar la obra pero el resultado es un compendio de clase, elegancia y genialidad ofrecida con sumo gusto por unos músicos que siendo unos recién llegados al AOR han sabido demostrar lo grandes que pueden ser. Un disco imprescindible de aquellos de: BUY OR DIE!!
Alex Lee Rush