MICHAEL ROMEO – War Of The Worlds Pt. II (2022) Review

English version below

Prólogo.

Corría el verano de 2018 cuando escribí para este mismo portal la reseña de War Of The Worlds Pt. I. En aquel momento, acabé la crítica diciendo: “…. y lo mejor de todo es que según declaraciones recientes del propio Romeo, la continuación a esta obra de arte, War Of The Worlds Pt II, está ya prácticamente acabada”.
Pues el disco estaría casi acabado, pero cuatro largos años han tenido que pasar para poder disfrutar de la continuación de aquel trabajo basado en la novela de H. G. Wells, The War Of The Worlds (1898!!!). Veamos si ha valido la pena la espera.

Los músicos.

La formación que ha grabado esta segunda parte de War Of The Worlds es en tres cuartas partes la misma que grabó la primera entrega. Aparte, evidentemente, de Michael Romeo, repite la sección rítmica formada por el batería John Macaluso y el bajista John DeServio. Las habilidades de Macaluso las conocemos sobradamente por su participación en discos icónicos como Burn The Sun de Arc, Realized Fantasies de los noruegos TNT o el debut de Starbreaker entre otros. También ha grabado y tocado en directo para gente como Yngwie Malsmteen, los americanos Riot y los propios Symphony X. John DeServio, quizás menos conocido, es el bajista habitual de los Black Label Society de Zakk Wilde desde hace un porrón de años.
La incorporación del fenómeno croata Dino Jelusic a las voces es la guinda para completar una banda increíble. Seguramente ya le conocéis casi todos, sobre todo a raíz de la incorporación a Whitesnake como teclista y básicamente como cantante de apoyo para el pobre Coverdale, que se nos está haciendo muy mayor. Pero, lo de este chaval cantando es increíble; su voz es una mezcla perfecta entre la chulería y el desparpajo del David Coverdale de los mejores años y la energía y agresividad de Jorn Lande

Las Canciones.

Si no fuera por el cambio de cantante, los temas de War Of The Worlds Part I y Part II se podrían tomar perfectamente como canciones pertenecientes a una misma obra, y es que en realidad casi todos están compuestos al mismo tiempo. Buena prueba de ello es Introduction Part II, la breve pieza orquestal que abre el trabajo y cuya melodía principal es la misma que ya escuchamos varias veces en la primera entrega del disco. 

La cosa se pone seria de verdad en Divide & Conquer, un auténtico torbellino donde ya nos queda claro que Jelusic es un cantante de primera división y que su incorporación a la banda es un acierto descomunal. El croata canta con auténtica pasión y su voz se acopla perfectamente tanto a las estrofas más fieras como a las partes más melódicas del estribillo. Mención aparte merece el solo de guitarra que se casca el señor Romeo. Joder, ¡qué guitarrista!!!! Precisión milimétrica, velocidad endiablada y un sentido de la melodía excepcional ¿No me crees?, pues compruébalo tú mismo en este breve video:MICHAEL ROMEO – Divide & Conquer (Guitar Playthrough)
El épico final del tema nos devuelve a la melodía de la intro para cerrar el círculo.

Destroyer –ya era hora que alguien le dedicara un tema con cara y ojos a nuestro amado líder, Carlos Destroyer– es un tema algo menos veloz, pero al mismo tiempo más heavy si cabe, y es que la guitarra de siete cuerdas utilizada con maestría le da al riff principal un aire muy agresivo y oscuro. La canción posee también influencias orientales, algo que si conoces la obra de Symphony X no te puede extrañar en absoluto, pues es uno de los recursos compositivos usados por Romeo habitualmente en su banda.

El segundo single del disco tras Divide & Conquer fue Metamorphosis; una canción de las más impresionantes del disco, bastante más progresiva que las anteriores y plagada de cambios de ritmo aquí y allá. 

Le sigue la pieza orquestal Mothership, donde si cierras los ojos podrás imaginar perfectamente la inminencia de la invasión marciana y a los trípodes gigantes de la novela original dispuestos a arrasar con su rayo calórico todo lo que encuentren a su paso.

Just Before The Dawn es lo más parecido a una balada que escucharemos en el disco y da continuidad a esta parte central del mismo, en la que prima la melodía sobre la velocidad. Me encanta en este tema el uso de los teclados; en muchos momentos parece que no están ahí, pero en realidad son la clave para dotar a la canción de un sonido mucho más cálido.

Seguimos con otro tema de carácter marcadamente progesivo como Hybrids. Impresionante, para variar, el extenso solo de guitarra cargado de variaciones, melodías exquisitas y la técnica y velocidad propias de Romeo, para repetir de nuevo el estribillo por última vez y acabar con una parte épica y orquestal que nos devuelve a una de esas melodías que ya escuchamos antes en este doble trabajo.

Hunted es otro tema orquestal, esta vez algo más extenso, que quizás influenciado por el título, a mí me transmite perfectamente la sensación de urgencia y peligro inminente que siente la presa perseguida por sus cazadores.

Machinenmensch, el robot/mujer de la película Metropolis, es el título de la siguiente canción, que por estilo y duración, más de 9 minutos, encajaría perfectamente en cualquiera de los dos o tres últimos discos de Symphony X. En manos de estos magos, 9 minutos dan para muchísimo; una larga introducción instrumental, unas estrofas muy heavys donde Jelusic se luce, una parte intermedia mucho más tranquila con un solo flipante, otra vez, tocado sobre una base de teclados y el bajo de DeServio, para volver nuevamente a la repetición del estribillo y dar esta pequeña suite por finiquitada.

Parasite es caña de la buena, con la banda tocando a toda velocidad y con un riff cercano al Thrash más técnico de bandas como Annihilator o al Heavy Metal de Iced Earth.

El tema orquestal Brave New World (outro) es, precisamente, lo que su nombre indica, la conclusión oficial de esta magna obra. Si estuviéramos ante una superproducción de Hollywood, aquí es donde veríamos los créditos finales.

Pero como pasa últimamente en tantas películas, tenemos un par de escenas postcréditos, y ojo, que no son canciones de relleno, ni muchísimo menos.

The Perfect Weapon es otro trallazo de puro metal que por momentos me recuerda a Metallica (The Four Horsemen, quizás?). Finalmente, Alien Deathray es otra pieza instrumental, pero esta vez interpretada por la banda y no solo por la guitarra y los sintetizadores de Romeo como las anteriores. La canción ha sido compuesta expresamente por Romeo para el lucimiento de Macaluso tras su kit de batería, lo cual dice mucho de la personalidad del guitarrista.

Conclusión.

Este disco es un reflejo de los gustos y las influencias musicales de Michael Romeo, más incluso que los trabajos de su propia banda, Symphony X. Componer un álbum, o dos en este caso, que no tienen que ser interpretados en directo le ha dado a Romeo la libertad de experimentar con ese sonido orquestal de las grandes bandas sonoras compuestas por John Williams o Hans Zimmer. Romeo también es fan declarado de bandas como Rush y Kansas, por un lado, y, por supuesto, de los clásicos del metal como Judas, Maiden o Metallica. Todo esto metido en una coctelera da como resultado este imperial War Of The Wolds Part II.

En cuanto a la temática del disco, a nadie puede sorprenderle a estas alturas que Romeo se base en un clásico de la literatura como The War Of The Worlds para crear una obra conceptual; ya lo hizo antes con Symphony X en discos como The Odyssey (2002), Paradise Lost (2007) o Underworld (2015). Además, la ciencia ficción le viene como anillo al dedo a esos pasajes orquestales que abundan en el disco.

Sea como sea, este es un disco sobresaliente. Para mí, el mejor disco en lo que llevamos de 2022. Si War Of The Worlds Pt.I ya era tremendo, este es incluso superior, y buena parte de la culpa es gracias a la aportación de Jelusic; un vocalista joven y apasionado por su oficio –menudo conciertazo de más de dos horas nos brindó en plena pandemia a los que tuvimos la suerte de verlo con su banda en la Sala Bóveda de Barna–, de un talento y versatilidad como hacía años que no se veía en el mundo del metal. Sumemos a eso la contrastadísima solvencia de tres cracks de sus instrumentos como son DeServio, Macaluso y el propio Michael Romeo, que además de ser un guitarrista increíble y una mente privilegiada a la hora de componer, es una persona humilde que ha dado plena libertad al resto de músicos para que aporten su estilo propio a la hora de interpretar las canciones ideadas por él. Esto se nota en el resultado final del disco, sobre todo en el caso de Jelusic, que aquí está completamente desatado y a sus anchas.

El disco está producido por el propio Michael Romeo y mezclado y masterizado por Simone Mularoni (DGM) que, por cierto, fue quien planteó a Romeo que Jelusic podía ser el cantante perfecto que estaba buscando para interpretar estas canciones ¡Menudo acierto!

War Of The Worlds Part II salió ya hace unas semanas a la venta y su primera edición en formato digipak incluye un CD extra con todas las canciones en formato instrumental.


Alberto Lozano
https://www.facebook.com/alberto.lozano.750

 

 

 


ENGLISH VERSION

 

Foreword.

Back in the summer of 2018, I wrote for this same website the review of War Of The Worlds Pt. I. At that time, I ended it by saying: «…. and the best of all is that, according to recent statements of Romeo himself, the continuation to this work of art, War Of The Worlds Pt II, is already practically finished«.

Well, the album might have been almost finished, but we had to wait four long years to be able to enjoy the continuation of that work based on the novel of H. G. Wells, The War Of The Worlds (1898!!!!). Let’s see if it was worth the wait.

The musicians.

The line-up that recorded this second part of War Of The Worlds is three-quarters the same as it was in the first part. Apart from Michael Romeo, John Macaluso (drummer) and John DeServio (bass) repeat in the rhythm section. Macaluso’s skills are well known for his participation in iconic albums such as Burn The Sun by Arc, Realized Fantasies by Norwegians TNT, or Starbreaker’s debut among others. He has also recorded and played live for the likes of Yngwie Malsmteen, Americans Riot, and Symphony X themselves. John DeServio, perhaps less known, has been the regular bassist for Zakk Wilde’s Black Label Society for a good many years. 

The addition of the fantastic Croatian Dino Jelusic on vocals is the cherry on top to complete an incredible band. Surely, almost all of you already know him, especially since he joined Whitesnake as a keyboardist and basically as a backup singer for poor Coverdale, who is not getting any younger. This kid’s singing is incredible; his voice is a perfect mix between the cockiness and the self-confidence of David Coverdale in his best years and the energy and aggressiveness of Jorn Lande. 

The Songs.

If it were not for being different singers, the War Of The Worlds Part I and Part II songs could perfectly belong to the same album. In fact, almost all of them were composed at the same time. A good example of it is Introduction Part II, the brief orchestral piece that opens the work and whose main melody is the same that we already heard several times in that first album. 

Things get really serious in Divide & Conquer, a real whirlwind where it is clear that Jelusic is a first division singer and that his incorporation into the band was the right choice. The Croatian sings with real passion and his voice is the perfect fit both in the fiercest verses and in the most melodic parts of the chorus. Mr. Romeo’s guitar solo deserves a special mention. Fuck, what a guitarist! !!!! Millimetric precision, devilish speed, and an exceptional sense of melody. If you don’t believe me, check it out for yourself in this short video: MICHAEL ROMEO – Divide & Conquer (Guitar Playthrough)

The epic ending of the song brings us back to the intro melody to close a perfect circle.

Destroyerit was about time that someone dedicated a good song to our beloved leader, Carlos Destroyer– is a slower melody while bringing a more «heavy» sound if possible. And, the seven-string guitar used with mastery gives the main riff a very aggressive and dark air. The song also has oriental influences, something that, if you know the work of Symphony X, can not surprise you at all, because it is one of Romeo’s resources in his band.

The album’s single after Divide & Conquer was Metamorphosis; one of the most impressive songs of the album, quite more progressive than the previous ones and full of rhythm changes here and there. 

It follows the orchestral piece Mothership. If you close your eyes, you can perfectly imagine the imminence of the Martian invasion and the giant tripods of the original novel ready to demolish everything in their path with their deadly flashes of light.

Just Before The Dawn is the closest thing to a ballad that we will hear on the album and it is very much in line with the album’s central part: melody over speed. I love the keyboards in this song. Often, it seems they are not even there. But in fact, they are the key to its warmer sound.

Next, comes Hybrids, another markedly progressive melody. And again, the extensive guitar solo is impressive: full of variations, exquisite melodies, and Romeo’s own technique and speed. Then, repeating one last time the chorus, finishing with an epic and orchestral part that brings us back to one of those tunes that we already heard before in this double work.

Hunted is another orchestral theme. A bit longer than the rest. It may just be autosuggestion by its title, but I think it conveys the sense of urgency and imminent danger felt by a prey pursued by its hunters.

Machinenmensch, Metropolis’ robot/woman, gives the name to the next song, which by its style and length, over 9 minutes, would fit perfectly in any of the last two or three Symphony X albums. In the hands of these virtuosos, 9 minutes yield a lot; a long instrumental introduction, some very heavy verses where Jelusic shines, a much quieter middle part with a stunning solo, once more played over a keyboard base and DeServio’s bass, to come back to the chorus to finish this little suite.

Parasite is superb, with the band playing at full speed, with a riff closer to more technical Thrash Metal bands like Annihilator or Ice Earth’s Heavy Metal.

The orchestral theme Brave New World (outro) is, precisely, as its name tells us, the official conclusion of this great work. If this were a Hollywood blockbuster, this would be the final credits.

But as it often happens in so many movies lately, we have a couple of post-credits scenes, and beware, they are not filler songs.

The Perfect Weapon is another blast of pure metal that at times reminds me of Metallica (The Four Horsemen, perhaps?). Finally, Alien Deathray is another instrumental melody, but this time performed by the entire band and not only by Romeo’s guitar and synthesizers as on previous occasions. The song has been expressly composed by Romeo to show off Macaluso’s drumming savoir-faire, which says a lot about the guitarist’s humility and personality.

Conclusion.

This album is a reflection of Romeo’s musical tastes and influences, even more so than the works of his own band, Symphony X. Composing an album, or two in this case, that does not have to be performed live gave Romeo the freedom to experiment with that cinematic orchestral sound of the great soundtracks composed by John Williams or Hans Zimmer. Romeo is also a big fan of bands like Rush and Kansas, on the one hand, and, of course, metal classics like Judas, Maiden, or Metallica. All this mixed in a cocktail shaker results in this imperial War Of The Wolds Part II.

As for the album’s storyline, no one should be surprised. Romeo leans on a literary classic like The War Of The Worlds to create a conceptual work, as he did before with Symphony X on albums like The Odyssey (2002), Paradise Lost (2007), or Underworld (2015). Furthermore, science fiction comes as a perfect fit for those cinematic orchestral passages that abound on this album.

Be that as it may, this is an outstanding album. For me, the best album so far in 2022. If War Of The Worlds Pt. I was already amazing, this one is even superior, and most of it thanks to the contribution of Jelusic; a young and passionate about his craft singer –what a great over two-hour concert he gave us at the peak of the pandemic to those of us lucky enough to see him with his band at the Sala Bóveda in Barcelona-,  with a talent and versatility not seen for many years in the Metal scene. Let’s add to that the proven solvency of three cracks of their instruments as DeServio, Macaluso, and Romeo himself, who besides being an incredible guitarist and a privileged mind when it comes to composing, is a humble person who gave full freedom to the other musicians to bring their own style to play the songs he created. The final result of the album should prove enough of this, especially listening to an amazing Jelusic. 

The album is produced by Romeo himself and mixed and mastered by Simone Mularoni (DGM), who, by the way, was the one who suggested to Romeo that Jelusic would be the perfect singer he was looking for to sing these songs. Kudos for that!

War Of The Worlds Part II was released a few weeks ago, and its first digipak edition includes a bonus CD with all the songs in an instrumental format.