La veterana banda revitalizó en su día un género bastante explotado como el heavy-metal. Consiguió darle nueva vida con sonidos más frescos y puristas, gracias en gran parte a las ideas que colocó en su seno Matt Sinner pero sobre todo a la poderosa voz de Ralph Scheppers, recién llegado de Gamma Ray.
Con su álbum homónimo consiguió llamar la atención de mucha gente, pero a raíz del segundo completo del grupo, “Jaws of death”, es cuando todas las miradas se colocaron en sus altavoces, sacando desde entonces auténticas joyas como “Nuclear fire”, “Seven seals” o “16.6”, discos que son considerados un referente para los nuevos seguidores y estudiosos del metal, y para muchos de los que siguen el género desde prácticamente su creación, canciones rápidas (en su mayor parte) a la par que medios tiempos, hacen del trabajo de estos alemanes que sus musas sean de las mas consideradas del panorama actual.
Y precisamente en la actualidad, que muchas de las formaciones de siempre se han vuelto a juntar o simplemente han vuelto a los sonidos que les hicieron destacar, ellos no se quieren quedar atrás con “Delivering tthe black”.
1.- King for a day: Se puede convertir en el tema con el que empiecen los conciertos de la gira, la cual pisará nuestro país en enero y febrero. Un tema directo al corazón de la guitarra, completo y fabricado para los seguidores más acérrimos del quinteto.
2.- Rebel faction: Es el trallazo rápido del disco, es la equivalencia al mítico Angel in black. Un corte escrito en sangre y perfectamente sentido. Una batería que se puede llegar a hacer monótona en algunas partes, pero que a la hora de entrar el doble bombo pondrá el pelo de punta al más contrario a ese sonido machacón. Por supuesto que sería de PF sin un momento de protagonismo de la guitarra, y ese momento está incluido hasta el momento en el que el sonido se seca y nos damos cuenta que estamos sudando por el tremendo headbanging que inconscientemente hemos hecho.
3.- When death comes knocking: Es el corte del plástico con el que los alemanes han querido dar a conocer este larga duración. Es casi un medio tiempo en el que el protagonista es la voz del hinchado vocalista. Siete minutos de canción con melodías arabescas pasado el ecuador del tema y sustituidas por unas melodías guitarreras, que en otro tipo de banda estarían consideradas de virtuosas.
4.- Alive & On fire: Al más puro estilo “Living after midnight” comienza esta barbaridad, pero tan solo esos 4 ó 5 primeros segundos de batería, ya que al entrar las melodías nos damos cuenta del enorme poderío del corte. Con Scheppers en el que probablemente es su mejor estado de forma vocal, en este corte acompaña al bajo de Sinner a la perfección.
5.- Delivering the black: Cuando a un disco le das el nombre de una de sus canciones, esa canción debe dar lo mejor de cada miembro de la banda, y realmente aunque en este caso no es el mejor corte del LP si hay una compenetración destacada dando sensación de ser un conjunto ya compacto a pesar que algunos de los miembros llevan relativamente poco tiempo.
6.- Road to asylum: Brutal declaración de intenciones, con un comienzo muy duro una canción a mitad de velocidad entre “When death comes knocking” y “Rebel faction” que no abusa de la voz del lampiño vocalista. Pero con una fuerza de fondo otorgada por el perfectamente encajado bajo de Sinner y una guitarra rítmica que merece la pena pararse a escuchar.
7.- One night in December: Despacio nos introducimos en este corte que de primeras da la sensación de ser llamado como uno de los himnos de PF, campanas de fondo, pausas en la voz, un solo de guitarra que nos describe una larga noche de diciembre, en definitiva un reset en lo que la gente puede decir de que el heavy es un ritmo monótono a lo largo de toda una canción. Un tema de casi diez minutos muy intensos, en el que descansan los oídos de quien está escuchando el disco y volver a la fuerza de siempre, excitados y con más ganas que nunca.
8.- Never pray for justice: Estribillo pegadizo, agudos, un ritmo repetido pero que funciona, no es una radio-fórmula pero entra bien. Y como siempre un solo de guitarra perfectamente estructurado.
9.- Born with a broken heart: Lo que faltaba era este baladón, increíblemente sentimental y con lo que nunca falla en PF una guitarra que te hace levantar del asiento.
10.- Inseminoid: No se cual sería su intención al escribir este balazo pero, desde luego, les ha salido uno de los corte más rápidos en su historia a lo mejor no tan intenso como mi adorado “The exorcist” pero muy pegadizo y con Ralph metiendo unos agudos tan típicos como imprescindibles en el producto que ofrecen.
En definitiva es un disco muy poderoso con auténticos trallazos, pero en opinión de quien os escribe algo más flojo que “16.6”, eso sí, perfectamente ensamblado y con un sonido realmente espectacular.
Frontiers haría muy mal si dejase escapar a este exponente del metal. En su estado de forma actual son capaces de hacer mover la cabeza a cientos de seguidores en sus conciertos, llevan su música tanto en la cabeza como en su corazón. Y servidor que tuvo la suerte de verlos en la gira anterior, vio que su fuerza no se diluye como en otras bandas sino que encima del escenario aumenta, recomendables al 100% en esa labor.
Sergio Subijana
1.- King for a day
2.- Rebel faction
3.- When death comes knocking
4.- Alive & On fire
5.- Delivering the black
6.- Road to asylum
7.- One night in December
8.- Never pray for justice
9.- Born with a broken heart
10.- Inseminoid
Vocalista: Ralf Scheepers
Guitarra: Magnus Karlsson
Guitarra: Alexander Beyrodt
Bajo: Mat Sinner
Batería: Randy Black