En 1981, una serie de diferencias creativas motivaron que Steve Walsh abandonase Kansas para formar Streets. En aquel momento, entró en escena un joven John Elefante, logrando ocupar tan exigente y soñado puesto, pasando por encima de candidatos como el mismísimo Sammy Hagar, Doug Pinnick (King’s X) o Ted Neeley, famoso por su papel en la película de Jesucristo Superstar en 1973.
En junio de 1982 veía la luz “Vinyl Confessions” y poco mas de un año después, “Drastic Measures”, que ya contaba con un protagonismo importante de Elefante componiendo todos los temas de aquel disco excepto los tres que firmaba Kerry Livgren. Lamentablemente, poco después el grupo acabaría por dividirse y John decide marcharse para iniciar una nueva faceta como productor, colaborando y escribiendo para otros y de tanto en tanto, ofreciendo algo como artista en solitario. Inició la aventura en 1995 con el álbum “Windows Of Heaven” y ahora, después de unos años de silencio, decide retomar con “The Amazing Grace”.
X.M: Entre tu tercer álbum y el cuarto transcurrieron catorce años y ahora has dejado pasar prácticamente una década entre “On my way to the sun” y este nuevo “The Amazing Grace”. ¿Hay algún motivo por el que decidas espaciar tanto tus lanzamientos en solitario?
J.E: No está planeado cómo se espacian mis grabaciones. He estado muy ocupado haciendo conciertos en directo y recuperando el tiempo perdido con mi familia; de hecho, soy abuelo ahora. Estoy muy emocionado de que hayamos completado un nuevo proyecto. Los discos son muy difíciles de realizar para mí porque yo me ocupo de hacerlo casi todo.
Me gustaría que me hablases del origen de estas nuevas canciones… ¿Han sido todas escritas expresamente para este trabajo o también has utilizado material acumulado a lo largo de los años?
No sé si sabría explicar el origen de cada una de las canciones, todas simplemente suceden y cobran vida propia. La única canción que ha existido durante bastante tiempo es «Falling Into Place». La grabamos hace más de diez años y decidí que era hora de sacarla del estante y terminarla. Sentí que encajaba bien con las otras en el disco.
¿Ese característico sello Prog Rock apreciable en tus composiciones es algo buscado de forma intencionada o surge de forma innata en ti?
Siempre he escrito canciones con un poco de dirección progresiva, pero debo admitir que ser alumno de Kerry Livgren me ha influido profundamente.
Canciones como “The Amazing Grace” o la impresionante “Not Alone”, tienen esa esencia inconfundible ‘marca’ John Elefante. ¿Percibes que se crea como una magia especial al afrontar medios tiempos como esos?
Creo que tu observación es correcta. Mi voz parece prestarse bien a las canciones que has mencionado. Y parece que este tipo de canciones han sido las más populares a lo largo de los años.
Los músicos que participan en el disco son prácticamente los mismos que en el álbum anterior. ¿Podría decirse que cuentas con una banda estable?
Sí. Y no solo son estables, sino que todos son músicos increíbles, tanto versátiles como familiarizados con lo que me gusta obtener de ellos. Sé que todos disfrutan tocando en mis proyectos, lo que lo hace fácil y divertido.
Canciones como “Time machine” o “Little Brown book” tienen algo que me hace pensar en bandas como The Beatles o The Who. No es algo especialmente evidente, pero diría que hay cierta influencia en ti de parte de la invasión británica… ¿Me equivoco?
No, no te equivocas, esas influencias son muy profundas en mi alma musical. ¡La mayoría de las veces sucede que ni siquiera me doy cuenta!
Me gustaría retroceder un poco en el tiempo ahora y que me hables de tu introducción en el mundo de la música. Según tengo entendido, empezaste tocando la batería en “The Brotherhood”, una banda formada por tu propia familia. ¿Qué alcance tuvo aquello y qué aprendiste en aquellos años?
Aprendí mucho porque era muy joven y como una esponja, absorbiendo cada canción que aprendíamos. Solía estudiar cómo se construían las canciones exitosas y las melodías y también los formatos de las canciones. Ser batería me ayudó mucho en mi carrera como cantante. Realmente me sirvió de forma importante con mi fraseo como vocalista.
Debió suponer un salto enorme para ti convertirte en el nuevo vocalista de Kansas… ¡en aquella época era una de las bandas más grandes y populares del planeta!
Recuerdo que pensé que no había forma en la tierra de Dios de que consiguiera ese puesto, pero las cosas empezaron a encajar realmente y sentía como si estuviera en un sueño del que me había despertado, ¡pero era real! Después de unirme a Kansas, no tuve tiempo de contemplar la enormidad de la situación porque tenía mucho trabajo por hacer para convertirme en el vocalista principal de una mega banda de rock.
¿Eras fan del grupo en aquel entonces? ¿Qué opinión te merecía Steve Walsh como frontman y vocalista?
Yo era un gran admirador de Kansas y Steve Walsh era un cantante que siempre idolatré.
Los dos álbumes que grabaste con ellos contenían excelentes canciones y algunas de ellas, escritas o co escritas por ti, se convirtieron en éxitos. ¿Por qué decidiste abandonar el grupo?
Esa respuesta es muy simple… Kerry Livgren y Dave Hope se marchaban y sentí que sin Kerry aquello no era Kansas.
Fue más o menos en aquel entonces cuando descubriste tu faceta como productor. ¿Cómo se produce tu primer acercamiento a ese terreno?
Mi forma de pensar era imaginándome a mí mismo como un miembro de la banda en lugar de como ese tipo de productor ‘inclinado hacia atrás en la silla’.
Pero dejaste pasar oportunidades de oro, como la de sustituir al mismísimo Bobby Kimball en Toto. ¿Por qué? ¿No te pareció un fantástico tren al que subir? ¿En algún momento te arrepentiste de haber rechazado aquella oferta?
¡No! No quería ser conocido como el cantante que reemplazaba a otros grandes cantantes, era hora de que lo hiciera por mi cuenta.
A lo largo de tu carrera has trabajado en múltiples proyectos junto a tu hermano mayor, Dino. Háblame de él… ¿Cómo describirías vuestra relación?
Dino y yo somos polos opuestos, nunca estamos de acuerdo en nada; pero dicho esto, siempre encontrábamos un término medio que funcionó muy bien.
Tu nombre está estrechamente asociado al rock cristiano, algo inevitable al contar entre tus trabajos como productor infinidad de obras maestras del género de artistas como Petra, Barren Cross, Guardian, The Brave, Bride… ¿De cuáles te sientes especialmente orgulloso?
Wow, ¡hay tantos…! Diría que todos los que has mencionado, así como también Mastedon, estarían en la parte superior de mi lista.
Imagino que Dios es tu principal inspiración en la vida. ¿Creciste ya con esa devoción o llegó más adelante?
No. Yo no fui criado en una familia cristiana. Fue un amigo de la banda “Idle Cure” quien me trajo a Cristo en 1980.
Has producido más de 100 álbumes, ganado cuatro Grammys (siendo nominado diez veces) entre muchos otros increíbles logros, premios y reconocimientos… ¿Tienes algún sueño pendiente por cumplir?
Realmente no… No diré que mi trabajo está hecho, pero estoy muy satisfecho con lo que he logrado, tanto en la música como siendo padre.
Volviendo a la actualidad, ¿Qué planes tienes para “The Amazing Grace”? ¿Tienes intención de presentarlo en vivo?
Vamos a esperar y ver a dónde lleva este disco, a dónde me lleve yo lo seguiré.
¿A qué dedicas la mayor parte de tu tiempo en la actualidad? Hasta donde sé, tu hermano y tú vendisteis vuestro enorme estudio hace unos años.
Estoy de gira dando conciertos bastante a menudo. Con el Covid, las cosas han tardado un tiempo en recuperarse. Soy un hombre de familia y me encanta pasar el mayor tiempo posible con mi familia.
Para finalizar, háblame de las letras. La esperanza, la fortaleza, la positividad… son conceptos imperantes, no hay duda.
A pesar de la pandemia que estaba en pleno apogeo durante la realización de este disco, tratamos de mantener un mensaje muy positivo de que, en las peores circunstancias, te vuelves más fuerte a medida que te abres camino.
Esto es todo, John. Agradezco enormemente tu tiempo y amabilidad. ¡Muchísima suerte con el nuevo álbum!
Gracias. Y Dios bendiga…
Entrevista: Xavi Méndez
