Crónica SAN NICASIO FESTIVAL ROCK 2021 – El Drogas / Sôber / Ciclonautas / Silver Fist

Fotos: Raúl Blanco

Festival Rock, Fiestas de San Nicasio, Leganés (Madrid) 10 Octubre 2021

Silver Fist / Ciclonautas / Sôber / El Drogas

Crónica y fotos: Raúl Blanco

Si hay un ayuntamiento que sigue apostando año tras año por el rock ese es sin duda el de Leganés. Los amantes del genero esperamos ansiosos año tras año para conocer los nombres de las bandas que formaran cartel para ese día dedicado al Rock, algo que es muy de agradecer y que desearíamos que más ayuntamientos aprendieras de esta diversidad musical. En esta ocasión fueron cuatro las bandas que arrancaron la “nueva normalidad” en la también reciente denominada como “La Nueva Cubierta”, la plaza de toros de la localidad del sur de Madrid que abría su bóveda para disfrutar de una velada que mezclaba el heavy más clásico de la mano de Silver fist, con el ex Muro Silverio Solórzano «Sílver«, con el rock de siempre a cargo de Sôber, el mítico ex de Barricada, Enrique Villareal “El Drogas”,  y el regreso de Ciclonautas.

 

 

La noche la abría Silver Fist, el heavy clásico nacional se apodero y atronó, y de que manera en La Nueva Cubierta. Y digo esto por que aun con la bóveda abierta el potente sonido de la banda hacía que sus melodías retumbaran de tal manera que no pudimos apreciar bien la propuesta que nos ofrecían los ex Muro. Aun así, disfrutaron de una gran recepción por parte de un público que demostró desde el primer momento que estaba allí para pasárselo bien por encima de todas las cosas.

 

 

Llegaba el turno de Ciclonautas, el grupo liderado por el batería de los navarros Marea, Alen Ayerdi, demostraron que la banda sigue conservando un buen cartel para el publico ya que se podía ver claramente a la audiencia corear cada tema de la banda. Es indudable el carisma de los argentinos, y el de Rosario, ‘Mai’ Medina, tiene la personalidad de sobra como para llevarse de calle a una cubierta que ya empezaba a estar metida por completo en harina. Ciclonautas aprovecharon muy bien sus, aproximadamente, cuarenta y cinco minutos para hacer las delicias de sus seguidores y llevarse un bueno puñado de nuevos curiosos.

 

 

No creo que haga falta mucha presentación cuando el nombre de Sôber sale a la palestra, pero bueno, si aun así lo necesitáis solo puedo deciros que, una vez más, su sonido, su actitud y maestría dejaron claro una vez mas que son uno de los grandes nombres de nuestro Rock. Carlos estuvo pletórico y sonriente toda la noche, Jorge y Manu sobrios y técnicamente perfectos y Bernardini…muy Bernardini, con esa actitud suya que no llegas a saber si está disfrutando o perdonándote la vida. Repaso de clásico finalizados como es habitual con la locura de “Loco” y un recinto dando botes.

 

 

Que incomodo es escribir de pie en un teclado, pero es que, para hablar del Señor Enrique Villareal hay que levantar el culo de la silla. Pensaba que nos presentaría los temas de su reciente “El largo sueño de la polilla” en ese formato intimo y acústico con el que está comenzando a girar, pero, muy inteligente por su parte, debió pensar que no era buena idea ese formato para tocar después de tres bandas de rock y a las 00:30 de la noche. El Drogas se llevo al publico de calle, nos hizo bailar, nos hizo saltar, nos puso a sudar, y se llevo la voz que nos quedaba con un show bestial que no hizo si no demostrar una vez más el por que El Drogas es una autentica leyenda viva de nuestra música. Siempre te deja con esa sensación de que su concierto ha durado muy poco, en este caso además fue real, duro muy poco. Solo queda esperar a que su gira acústica aterrice en la capital. Larga vida al Drogas.