BONFIRE / LEYENDA
Sala Cool, Madrid, 29 sept 2019
Crónica y fotos: Raúl Blanco
En el mismo sitio y a la misma hora, y prácticamente con el mismo setlist, así podría definirse el regreso a la capital de los germanos Bonfire. Tal y como sucediera en 2017, la Sala Cool Stage hacía de nuevo de refugio de la banda del único superviviente Hans Ziller. Lo único que cambiaba eran los encargados de abrir la noche, en esta ocasión fueron Leyenda, los madrileños que están terminando de exprimir su sexto trabajo de estudio “Cibernética”.
Lo cierto es que no dispusieron de mucho tiempo, ni público, y quizás por eso me resulto que su descarga fue un poco de trámite, cumpliendo el expediente y para casa. Es más, quizás lo más destacable y emotivo de su concierto fue la entrega de un cuadro como homenaje a su batería por sus cinco años en la banda. Puede que fuera una sensación mía pero incluso me pareció que tanto Antonio como Diego se dedicaron en ciertos momentos a buscar algo con lo que divertirse entre el público, todo muy frió. He visto a Leyenda unas cuantas veces y esta desde luego no será de las que les recuerde como de las mejores. En fin, esperaremos su nuevo lanzamiento y que recobren esas ganas que entiendo perfectamente que a veces se pierdan un poco.
No eran ni las 21:30 cuando Bonfire comenzaron su “show” entre comillas, si, y esta puesto con toda la intención del mundo. Creo que alguien debía haberles dicho que tenían hora y media para hacer su setlist, que no hacía falta subir de revoluciones e incluso destrozar literalmente clásicos del Hard Rock. Hay momentos en los que se debe hacer autocrítica y pensar si lo que estamos haciendo merece la pena, no vale todo, no es únicamente cuestión de poner en un cartel el nombre de un grupo que ha sido muy querido por el público para pensar que ya está todo hecho, incluso te puedo “comprar” que tu intención actualmente sea hacer otro estilo de música y dejes de lado unos discos que son considerados joyas por muchos de tus seguidores.
Si el concierto hubiera seguido la temática actual con temas como “Temple of lies” o “Praying for a miracle” esta crónica no hubiera tenido nada que ver con lo que estáis leyendo, es su apuesta actual, genial, te guste o no, son los Bonfire actuales pero no, no es de recibo que “adaptes” cortes como “Hard on me”, “American Nights” o “Sweet obsession” a un intento completamente baldío de Heavy Metal clásico, y digo intento por que ni eso consiguieron más allá de acelerar todo. No sé de cuando viene esto porque yo no recuerdo asi el concierto de hace dos años, o quizás esté perdiendo la memoria, el caso es que me puede fastidiar más o menos como seguidor suyo lo que hicieron esta noche con sus temas pero que además decidan convertir en un tema infumable el “Burning Heart” de Survivor…no. Doy gracias al cielo que no decidieran, y pido perdón anticipada por la expresión, cagarse encima de uno de los tres temas de Toto que decidieron destrozar por completo en su sonrojante “Legends” publicado el año pasado, creo que mi corazón no podría haberlo soportado.
Yo no veía el momento de aquel despropósito terminara cuanto antes, incluso creí que por fin había llegado el final cuando decidieron alterar el orden y reventar “Champion” pareciendo una banda de power metal pero, no, el despropósito fue tal que tras un breve descanso pensaron que lo mejor era terminar aquello…¡con una balada! Tal cual, como lo leéis, valía todo, para que vas a irte de subidón, el que lo tuviera claro está, con “Champion” pudiendo hacerlo en plan romántico, también por decirlo de alguna forma, con “You make me feel”. Me pase prácticamente una hora y media imaginándome a un tal Claus Lessmann, con todos los problemas vocales que tiene de un tiempo a esta parte, tirado por los suelos de la risa viendo el concierto de Bonfire en Madrid. Ha sido una relación muy bonita, nos hemos querido muchísimo pero no quiero hacerte daño, te mereces algo mejor que yo, te quiero demasiado como para hacerte esto, tenemos que dejarlo, no eres tú, soy yo. Hasta siempre Bonfire.