BONDED – Rest In Violence (2020) Review

“Escucha esto, ¡Thrash del bueno!”, me dijo hace unas semanas nuestro Master, Carlos Destroyer, que de música sabe un rato. 
La cosa es que andaba preparando la reseña del disco de ANNIHILATOR, que me tenía loco, y tenía en mente también el de SEPULTURA. Así que no le presté mucha atención al disco debut de BONDED. ¡No podría compararse con las nuevas obras de esas bandas tan míticas!

La cosa es que hace un par de semanas, enganché el disco, sin muchas expectativas, pero… ¡craso error! Lo que tenía entre manos no era un disco sin más, de una nueva banda. Tras el nombre de BONDED, se escondía el nuevo proyecto de Bernemann y Makka, guitarra y batería durante muchos años de los grandes SODOM. Y claro, esto ya son palabras mayores. Junto a ellos, otros músicos desconocidos para mí, pero curtidos en bandas del calibre de SUICIDAL ANGELS, ASSASSIN… El resultado, como se puede imaginar, es una bola de demolición sonora, que está amenazando con romper las ventanas de mi coche estos días.

Uno de los puntos fuertes de disco es, en mi opinión, que intentan meter distintos matices a su contundente propuesta. A ratos escuchamos un Thrash alemán de toda la vida… a ratos me suena a los TESTAMENT más actuales… a ratos incluso a nuestros ANGELUS APATRIDA (porque sí, ya son un referente)… y a ratos, las sonoridades van más por los caminos del Groove metal (como por ejemplo en la potente y rítmica “Je suis Charlie”, que es un pepinazo). Pero vamos, que aquí lo que priman son las montañas de riffs rápidos y contundentes, los solos de guitarra desbocados y unas bases rítmicas brutales que pugnan por rompernos los cuellos, como por ejemplo en “Suit Murderer” o “The Rattle & The Snake”, pura agresividad.

Las voces de Ingo Bajonczak, son muy agresivas y abrasivas durante todo el disco. Para mis gustos particulares, algo más de lo deseable. Quizás es que siempre me ha gustado más el Thrash americano, que el alemán. “No cure no life” es uno de los dos temas dónde bajan un poco las revoluciones. La voz tan rasgada (no confundir con algún subgénero acabado en “–core”), hace que el tema pierda un poco el foco en mi opinión. Una voz un poco más limpia, le hubiera quedado mejor, aunque lo cierto es que el tema es muy intenso y rítmico, y no pasa desapercibido. “The outer rim” que cierra el disco, también tiene unas partes más lentas y melódicas, aunque luego tiene sus subidas de intensidad, siendo el tema más distinto y un muy digno final.

Quizás por este tema de que las voces son lo que menos me gusta, mi punto fuerte del disco es el tremendo “Rest in violence”, cantado con su habitual maestría por el inigualable Bobby Blitz (OVERKILL). El tema podría pasar por un nuevo single de los americanos y es absolutamente bestial, coronado por un estribillo muy de dejarte la voz en directo. ¡Lo tiene todo!

Mi otro tema favorito es “Where silence reverberates”, que empieza con una intro subiendo en intensidad y rompe al minuto a toda pastilla. En muchos momentos nos parece estar escuchando a Chuck Billy y sus TESTAMENT, aquí sí que la voz es tremenda y el tema es un puto decálogo de lo que yo entiendo por Thrash Metal. “Galaxy M87” es de las que mejor entran de inicio, con unos grandes riffs y un estribillo muy reconocible. Tras muchas escuchas, el estribillo se me hace algo repetitivo. En todo caso, seguro que en directo monta un buen jaleo.

No me quiero extender en mencionar todos los temas… “Rest in violence” mezcla, para mí con total maestría, elementos del mejor Thrash old-school de las legendarias bandas americanas y alemanas, pero con una producción y un sonido completamente actual. Bernemann y Makka son ya perros viejos, y han montado una banda muy competente, que nos ha regalado un debut casi intachable. Pura energía y brutalidad, con las dosis justas de variedad, que hacen que nunca decaiga el ataque, pero sin que se haga monótono. No lo dejéis pasar.

Palabra de Metalson


RATE/NOTA: 8/10

 

Iñigo Metalson (The Lux Team)