THE QUIREBOYS / PÖLISONG – Crónica

THE QUIREBOYS / Pölisong
Sala Caracol, Madrid, 4 Marzo 2018
Crónica y fotos: Raúl Blanco


La visita de los británicos The Quireboys a nuestro país es ya todo un clásico prácticamente anual, como el que vuelve a casa por navidad, y no debe de importarle a la gente ya que no hay concierto de las huestes de Spike que no presente una grandísima entrada, si es que no cuelgan el cartel de SOLD OUT. En esta ocasión el lugar elegido en la capital fue la sala Caracol y una vez más, gran afluencia de un público entregado al grupo desde casi la apertura de puertas.

El combo elegido para abrir el show eran un chavalitos gallegos, Pölisong, de los que un servidor no conocía absolutamente nada hasta que fueron anunciado para el bolo, incluso pensé que se tratarían de unos “vikingos” por aquello del nombre y la diéresis que lleva pero no, nada más lejos de la realidad, me encontré a un grupo de rock and roll absolutamente brillante. Salieron a escena sin ningún tipo de complejo, desgranando cortes de su álbum “High”, que por su puesto al finalizar el concierto acabo en mi mochililla previo paso por el merchand, porque aunque algunos penséis lo contrario los que hacemos prensa también compramos discos.

 

 

Sería injusto que destaque a alguno de ellos porque, lo creáis o no, son unos músicos con un nivel muy alto, como os comente anteriormente no conocía prácticamente nada de Pölisong como a buen seguro os pase a vosotros pero yo por mi parte está solucionado ya que no tardaron nada en convencerme de su calidad con temas que por momentos tienen un aire de rock añejo a lo Led Zeppelin. Se despidieron del escenario tras casi una hora de concierto con “Say my name” haciéndonos corear a todos su nombre, Pölisong, que a buen seguro sonara muchísimo en el futuro. Yo fui a ver a The Quireboys y salí queriendo ver más de esta banda.

 

 

Creo que no va a sorprenderos si os digo que desde el segundo uno Quireboys ya tenía el concierto hecho, la gente metida en el bolsillo y solo era cuestión de dejarse llevar, da igual que los temas fueran nuevos, de hace unos años o clásicos del grupo, ver a Spike con su férula en el pie por su muy maltrecho tobillo darle puntapiés al pie de micro y moverse serpenteando como en él es habitual pasando por completo del dolor, seguro que en parte gracias también a la bebida “isotónica” de su copa y que no era la primera que caía esa tarde noche, hacía que disfrutaras como un enano del espectáculo.

 

 

El primer tema de lo nuevo del grupo en caer fue “Going down” tras dar las gracias por hacer del álbum un éxito y que precedió a un muy celebrado “There she goes again” por qué, no nos engañemos, aunque la discografía de los londinenses está muy bien, su debut, “A bit of what your fancy” es sin lugar a dudas su obra maestra y así se demuestra con cada canción que interpretan en cada concierto. No son de mucho hablar, por lo que más allá de algún que otro comentario gracioso acerca de su “último modelo de zapatos” los temas iban cayendo sin descanso apenas.

 

 

Por más veces que vea a la banda en directo no dejara de sorprenderme como Keith Weir, que tienen un gran peso en el sonido del grupo permanece prácticamente atrincherado y escondido con su teclado detrás los amplis de Guy Griffin, incomprensible, mas después de escuchar el teclado en la maravillosa “Mona Lisa Smiled” en la que también termino de otorgar el protagonismo a un muy brillante esa noche Paul Guerin. Una forma de entender por qué año tras años la banda este en nuestro país con gran éxito es escuchar por ejemplo “Roses & Rings” y esa voz castigada por la nicotina y el alcohol de Spike, solo escuchando temas así entiendes que esto no tiene pinta  de que deje de suceder, afortunadamente.

 

 

El punto de inflexión, y de descontrol absoluto por parte del público, llego pasado el ecuador del show con la preciosa “I don´t love you anymore” que lleno de sentimiento la sala reflejado perfectamente esa sensación tan manida de “piel de gallina” que se podía sentir en todos y cada uno de los que estábamos allí. No colaba el comentario de Spike de “esta es la primera que me tomo esta noche” y más cuando al poco comento, “espero no caerme del escenario hoy, no me ha pasado nunca”, pero todo era porque el final de la fiesta venia como si de unos fuegos artificiales se tratara, con sus temas más clásicos, “Hey You”, “Sweet Mary Ann” y “7 O´clock” antes de dejar el escenario momentáneamente, como buenamente pudieron, agarrándose a todo en el caso del castigado Spike.

 

 

Poco tuvimos que insistir, no había tiempo que perder así que, ahí estaban de nuevo Spike y compañía para cerrar la noche con un enloquecido “Sex Party”. Quizás sea una mala costumbre también pero su show prácticamente no supero los setenta y cinco minutos de duración lo que una vez más te lleva a pensar si es o no suficiente. Algunos dirán que prefieren setenta y cinco minutos así que con temas de relleno, a otros les parecerá insuficiente, en cualquier caso de lo que no hay duda es que lo que vimos una vez más fue una auténtica fiesta de auténtico Rock and Roll sin aditivos ni conservantes artificiales, todo de verdad, todo real para bien o para mal.

 

Pölisong Setlist

1.Shake it

2.Save me

3.Warrior

4.Way of love

5.Stand up

6.Dream of you

7.Light

8.Kisses

9.Bodies

10.We are free playing R´n´R

11.Say my name

 

 The Quireboys Setlist:

1.Too much

2.Misled

3.Going down

4.There she goes

5.Leaving trunk

6.Mona Lisa

7.Roses + rings

8.Rock and roll

9.King bee

10.I don´t love you

11.Tramps

12.Hey You

13.Sweet Mary Ann

14.7 O´clock

15.Dirty town

16.Sex party