Are you ready to rock? To blues? To jazz? To soul? Espero que estés preparado para todo eso y más, porque Paul Gilbert te trae un álbum que es una colección de temas en los que resuena desde la música clásica hasta el hard rock más contemporáneo: I Can Destroy.
Todos recordamos su paso por Racer X y, muy especialmente, por Mr. Big, banda histórica por la calidad y originalidad de sus temas, el virtuosismo bien entendido de sus músicos y el estilo de su frontman. Entonces parecía casi imposible imaginar una mejora de Paul como guitarrista y, sin embargo, él solito se ha encargado de sacarnos de nuestro error. Lo ha hecho con toda una discografía (éste es su decimoctavo trabajo), sus clinics (cuánto disfrutamos de su último “cliniconcierto” hace casi cuatro años), sus campus y cursos…Pero, sobre todo, por su pasión por la música, sus ganas irrefrenables de explorar las posibilidades del instrumento y sus dotes para la enseñanza, acompañadas de una simpatía y cercanía poco comunes.
I Can Destroy viene de la mano del sello alemán earMusic, con trece temas bajo el brazo y una compañía de lujo. A las voces y las guitarras tenemos a Freddie Nelson (Too Tall Jones) y Tony Spinner (Toto), al bajo Kevin Chown (Tarja Turunen, Chad Smith’s Bombastic Meatbats) y Thomas Lang (Glenn Hughes, Peter Gabriel, Robbie Williams…), a la batería. A cargo de la producción está Kevin Shirley (Journey, Iron Maiden, The Black Crows, Led Zeppelin…), un auténtico experto para dar el toque final al trabajo.
Una curiosidad con riff y ejercicios de virtuosismo instrumental y vocal da comienzo al álbum: Everybody Use Your Goddam Turn Signal. Inmediatamente disfrutamos el tema que da nombre al mismo, de claro corte rockero, guitarrero y muy rítmico. Voz desgarrada y un estribillo de directo para completar un riff de virtuoso. Uno de los temas que más me han gustado, por eso y por la manera en que el solo se sale de la línea del resto del corte. Knocking on a Locked Door es una canción alegre y en la que, como a lo largo de todo el trabajo, cambiamos de línea estilística, en este caso hacia algo más soul . Se beneficia del aderezo de los cambios de tono y la maestría usada para adornar el tema. One Woman Too Many se adentra en los terrenos del jazz-blues con un cierto toque latino y Gilbert utilizando alguna de sus técnicas patentadas. Temática simpática, en especial para los hombres (je,je), y nuestro protagonista desatado mostrando todo su virtuosismo y background musical sin complejos, para acabar disparándonos rítmicamente.
De mujeres va la cosa cuando nos adentramos en Woman Stop. Y es que no podemos vivir sin ellas. La batería abre paso a un riff compartido que sienta las bases de un corte más melódico y con el toque slide que siempre suma. ¿Sencillo? Nope. Evoluciona, como todos, hacia un ejercicio bien medido de dedos de alto nivel. Gonna Make You Love Me abre las puertas del puro rock & roll. Un rock clásico bien cantado y tocado, que también se disfraza de básico, para que un cambio rotundo a mitad del tema y la guitarra Gilbertiana terminen por centrarnos. I Am Not the One (Who Wants to Be with You) vuelve a cambiarnos de planta en esta torre de babel musical que es el I Can Destroy. Nos lleva a una más cañera y bluesrockera que nos encanta. Blues Just Saving My Life no engaña. ¿O sí? Es un blues, pero lo es a lo Paul Gilbert & friends. Gracioso por la letra y aparentemente clásico, muta y se enriquece sumando toques soul, detalles de voz y las guitarras aportando su particular versión del género. Genial.
Make It (If We Try) supone otro giro direccional al que no le haremos feo, a pesar de ser más pop, ya que posee la misma virtud que sus predecesores, el aprovechar el texto como pretexto para decir su mensaje: la música como vehículo de expresión y diversión. Tampoco lo haremos cuando bajamos un piso y nos ponemos románticos y acústicos con Love We Had, una curiosidad con buen trabajo coral y final absolutamente beatle, para tomar fuerzas para I Will Be Remembered. Se trata de un tema rock con toques soul de alta escuela y sonido clásico deliberadamente perseguido y alcanzado.
Adventure and Trouble supone el penúltimo piso de la torre. No sabemos si empezando por arriba o por abajo, porque una de las cualidades de I Can Destroy es que puede ponerse en modo aleatorio, porque no es temático sino enciclopédico. Lleno de sentimiento, con una voz y detalles de categoría por todas partes, el corte bluesero te hará gozar hasta su particular y enérgico final. Great White Buffalo es el corte de regalo y, a pesar de llevar el número que lleva, no te trae nada malo ni es una despedida poco propicia, pues se trata de un tema basado en un riff casi imposible, potente, con una voz muy rockera y un toque positivo que se apoya en un trabajo rítmico excepcional. La parada, con el singer en modo hablador, que tanto me gusta (recuerdo aquí a David Lee Roth), pone la guinda.
Si te encanta la música y estás dispuesto a comprobar lo que son capaces de hacer lo auténticos genios, cuando dominan su instrumento y deciden componer canciones, disfrutarás como un crío con I Can Destroy. Si eres un incondicional de Paul Gilbert también. El álbum es un ejercicio de exploración estilística a través de temas directos y de estilo variado, pero también es una demostración de virtuosismo de un grupo de amigos que quieren divertirse y prueban lo fácil que es todo cuando vas sobrado de técnica y escaso de apriorismos.
Toño Martínez Mendizábal
Track List
1 Everybody Use Your Goddam Turn Signal
2 I Can Destroy
3 Knocking on a Locked Door
4 One Woman Too Many
5 Woman Stop
6 Gonna Make You Love Me
7 I Am Not the One (Who Wants to Be with You)
8 Blues Just Saving My Life
9 Make It (If We Try)
10 Love We Had
11 I Will Be Remembered
12 Adventure and Trouble
13 Great White Buffalo
