Noveno disco ya de la formación austriaca de metal sinfónico liderada por el multi-instrumentista Lanvall y la vocalista Sabine Edelbacher. Nueve discos son muchos, más de 15 años de carrera. Yo personalmente nunca hubiera apostado por que esta banda tuviera una vida tan longeva. Siempre correctos pero nunca sobresalientes, al menos hasta la fecha y a bastante distancia, en mi opinión, de bandas similares en estilo como podrían ser Nightwish o Within Temptation.
Pero sin prejuicios, vamos a tratar de analizar este The Great Momentum.
El disco se abre con Shiantara, un tema inspirado en la saga de ciencia ficción Star Trek y muy del estilo Threshold. No en vano Karl Groom, guitarrista y líder de los progresivos británicos es quien mezcla el disco, y su mano se nota (para bien) en muchos momentos a lo largo de todo el trabajo. Buen tema.
Una breve introducción acústica da inicio a The Die Is Not Cast. En seguida un riff agresivo de guitarra toma las riendas de la canción en un tema que a mi me evoca también, sobre todo en el estribillo grandilocuente y gracias a la aportación de los arreglos orquestales, los viajes espaciales y la ciencia ficción. Una canción muy del estilo de los primeros Aeryon.
Si antes mencioné a Nightwish y a Within Temptation fue en gran parte por que The Moment Is Now me recuerda a estas dos bandas; a Nightwish en las estrofas y a Within Temptation en el estribillo. El problema es que Sabine Edelbacher no me transmite lo mismo, ni de lejos, que Floor Jansen o Sharon den Adel.
Until The end Of time es una balada donde Sabine canta a dúo, siempre según la documentación que la compañía discográfica adjunta con el Cd, con alguien que se supone es Erik Martensson (Eclipse). Y digo se supone porque yo, que he escuchado los discos de Eclipse hasta la saciedad y que he visto un concierto de los suecos en primera fila, no reconozco en ningún momento que esa voz masculina sea la de Erik Martensson, ni por el timbre de voz ni por la forma de cantar. Así que una de dos: o al chico le ha cambiado la voz de repente o este no es Martensson ni en broma. Misterio….
En The Visitor vuelven las guitarras eléctricas y las orquestaciones al primer plano. Es una canción con varios cambios de ritmo: con partes muy tranquilas y con otras donde las guitarras más afiladas toman protagonismo y de nuevo con un estribillo donde los arreglos orquestales tratan de dotar de pomposidad y dramatismo a la canción.
Return To Grace posee ese toque oriental en su melodía que desde el inicio de los tiempos tantas veces hemos escuchado en el Hard Rock. Esto combinado con el doble bombo en el estribillo más «power metalero» de todo el disco da como resultado un contraste curioso pero que no acaba de funcionar del todo. Y es que con esta banda siempre me pasa igual; hay buenas ideas pero al final las canciones, o incluso los discos en su conjunto, no acaban de ser redondos del todo. De todas formas me parece de las canciones más interesantes de todo el disco.
La segunda balada del disco es Only A Whiff Of life. Un tema con la voz de Sabine y el piano y las guitarras acústicas de Lanvall casi como únicos protagonistas. En general soy poco amigo de las baladas o los temas intimistas en los discos de metal; muy buenos tienen que ser para que no acaben por parecerme aburridos. Y poner dos en un disco de nueve canciones me parece correr un riesgo muy grande de que todo el trabajo en su conjunto se resienta y pierda ritmo.
El penúltimo tema es A Turnaround In Art. Un medio tiempo bastante tranquilo y de más de siete minutos de duración, con gran cantidad de orquestaciones en el rimbombante estribillo. Personalmente me deja bastante frío.
Finalmente el disco se cierra con el que en teoría debe ser el plato fuerte. The Greatest Gift Of All son más de doce minutos de canción. No es una mala canción, ni mucho menos, pero peca de lo mismo que la anterior; en mi opinión le falta algo de ritmo y resulta un poco repetitiva. Y es que no se pone realmente interesante hasta pasado el minuto siete. Son demasiadas canciones seguidas entre baladas y medios tiempos que hacen del final del disco un poco aburrido. Otro fallo que le veo es que acaba con un triste «fade out». Para ser la canción más importante del disco y la última, se merecía un final más trabajado. Es una manía mía, pero una vez leí una entrevista a un músico que decía que el final de un tema debe ser como una canción de pocos segundos dentro de otra canción. Me parece una definición perfecta.
En resumen: este The Great Momentum es un buen disco, pero nada más. Ni imprescindible, ni espectacular. Tiene canciones interesantes, está bien producido, las orquestaciones no suenan artificiales (seguramente están grabadas por una orquesta de verdad)… pero sobretodo al final resulta un poco monótono y aburrido. Como dije antes Sabine Edelbacher no es ni Floor Jansen ni Sharon den Adel, vocalistas que por si solas le dan vida y color a sus discos. Lanvall tampoco es un guitarrista que te vaya a dejar con la boca abierta, y por desgracia, aunque hay buenas ideas y tres o cuatro canciones bastante resultonas, algunas otras resultan un poco monótonas y la nota final se resiente un poco. No encuentro ni una sola es de esas canciones que te dejan impactado y que hacen que de vez en cuando rescates el disco de la estantería, aunque solo sea para escuchar ese temazo que te impresionó las primeras veces que escuchaste el disco. Ya dije al principio que Edenbridge me parecía una banda de segunda división comparándola con otras de estilo similar; Nightwish o Aeryon por ejemplo. Y este disco, aunque está mejor que otros de la banda, no ha conseguido que cambie de opinión, al menos no del todo (siempre dicho esto con el máximo respeto hacia unos músicos que habrán dedicado incontables horas a preparar estas canciones y que lo hacen seguro lo mejor que pueden).
Lo que sí que hay que reconocer es que el trabajo suena perfecto. Mezclado por Karl Groom (Threshold) en su propio estudio Thin Ice en Inglaterra y masterizado por Mika Jussila en los famosos estudios finlandeses Finnvox.
Alberto Lozano
https://www.facebook.com/alberto.lozano.750
Tracklist:
- Shiantara
- The Die Is Not Cast
- The Moment Is now
- Until The End Of Time
- The Visitor
- Return To Grace
- Only A Whiff Of Life
- A Turnaround In Art
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The Greatest Gift Of All
EDENBRIDGE son:
Sabine Edelsbacher: voz solista
Lanvall: guitarras, bajo, piano y teclados
Dominik Sebastian: guitarras
Johannes Jungreithmeier: Drums
A la venta el 17 de febrero en los formatos habituales.