Hay tantos lanzamientos casi todos los días que es fácil que muchos se nos escapen. En el rock y hard rock, estamos presenciando lanzamientos muy interesantes para los que, sin embargo, no nos queda casi tiempo. Por eso, aquí va una lista no-exhaustiva de discos que han visto la luz en lo que llevamos en 2015 y que, por una razón, han podido pasar desapercibidos.
Eldorado – Karma Generator / Babylonia Haze
La banda española no tiene ya nada que demostrar a quien se haya dignado a prestarles un oído. Su último disco, Karma Generator (en castellano) o Babylonia Haze (en inglés) es probablemente el mejor hasta la fecha, y contiene diez cañonazos que van a ir, salvo sorpresa de últimos meses, directas a muchas listas de lo mejor del año. Te guste o no la música en castellano (para eso hay dos versiones), si buscas una banda de hard rock de verdad prometedora, Eldorado van a gustarte.
The Grammers – Journey
Al principio desconciertan. Después, no sabes si tomártelos en serio. Tras algunas escuchas, acabas apreciando el ingenio de estos escandinavos a la hora de crear canciones comerciales a la par que originales. No vale la pena pararse a escuchar un tema únicamente, porque cada uno de los que componen “Journey” tiene personalidad propia.
Alpha Tiger – iDentity
Hard, heavy, y algunos ramalazos más modernos de una banda que ha pasado de sorprendernos a prácticamente desaparecer tras romper con su vocalista. Un disco ecléctico, atrevido, que recuerda tanto a los primeros Queensryche que puede echar atrás. Pero, al contrario, lo hacen tan bien que, acompañado de varios riffs y estribillos con gancho, lo convierte en uno de sus valores.
Atlas Road Crew – Halfway to Hopkins
Joya oculta que nos llegó gracias a Galaxia del Rock, el primer larga duración de este quinteto norteamericano tiene trazas de southern, otras de rock alternativo, pero es un trabajo ecléctico que evoca a ratos a los Tesla más melódicos, a Bob Seger, y otros clásicos del rock americano. Un trabajo que crece con cada escucha, y no sabemos dónde parará.
Bad Touch – Half Way Home
Otro debut, éste de británicos, algo más efectivo y directo, pero de la misma calidad. Apoyados en unas guitarras contundentes que han aprendido mil y un riffs, las composiciones de este “Half Way Home” se enmarcan casi todas en el mejor rock que sigue la estela que va desde los Led Zep hasta los Black Crowes. Hay un millón de bandas en el estilo, pero no todas con la calidad y el futuro de Bad Touch. La portada, impropia de estos tiempos, no hace justicia al contenido.
Band of Brothers – S/T
Una banda prácticamente desconocida. Band of Brothers es un combo sueco que ha estado rumiando los temas de este debut durante años, hasta al final grabarlos. El resultado es ciertamente satisfactorio, un buen disco de rock con toques de melódico que parecen recuperados de mediados de los ochenta, a lo que hay que añadir una fantástica producción que hace que cada capa de guitarra, cada coro suene perfecto. Mucha clase.
Four Sticks – Electric Celebration
Quizá el más psicodélico de estos diez, Four Sticks toman su nombre de la canción de Led Zep, y se jactan de unas influencias bien marcadas que van desde su portada, caleidoscópica, hasta los teclados y las armónicas distorsionadas. Liderando la formación, la voz de Stefan Berggren, que ha pasado por bandas como The Company of Snakes. Garantía de calidad.
Red Sky Mary – River Child
Este cuarteto norteamericano ha sido la última sorpresa en lo que llevamos de año. Que no despisten los guitarrazos acdceros con los que comienza el álbum. “River Child” tiene elementos prestados de muchos lugares pero consiguen hacerse marca propia, como The Jokers, Rival Sons, y otros muchos. Pero Red Sky Mary suenan mucho a sí mismos, y eso ya es, en sí mismo, algo que celebrar. Otro candidato a las listas de final de año.
The Vintage Caravan – Arrival
Una pequeña decepción, pero una decepción que debe ser escuchada para juzgar de primera mano. Las expectativas eran quizá demasiado altas para este trío de chavales que ha arrancado con mucha velocidad. Las babas que soltamos con la introducción que abre el álbum no consiguen aguantar mucho más allá de la mitad de un disco que, si bien parecido en duración a su predecesor, se hace mucho más árido.
Bite the Bullet – Wheels
Probablemente la banda más peculiar de estas diez, Bite the Bullet han sacado un disco que ha hecho muy poco ruido, pero que ha conseguido salirse del molde, con canciones en las que el rock y el fuzz son sólo uno más de sus elementos, en las que se juega más con atmósferas, ritmos y melodías que parecen más cercanas al indie, pero que mantienen el espíritu y la producción de unos frescos setentas.
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