Las ilusiones se dispararon cuando se hizo público el anuncio del nuevo cartel del Zurbarán. No sólo por el cambio de ubicación, la plaza de San Agustín, un entorno que a la postre se mostró idílico para semejante evento y similares en un futuro, ni por la fecha, un sábado que coincidía con el día grande de las fiestas patronales de Burgos en vez de un domingo de resaca tras las mismas y como aconteció el año pasado, sino por el plantel de bandas que se ofertaban en esta nueva aventura, cuarta ya, de lo que se ha consolidado como un festival por derecho propio de obligada asistencia para los amantes del Rock.
El adjetivo gratuito se sumaba con fuerza al despliegue, estudiado hasta el milímetro, de formaciones locales, nacionales e internacionales, para hacer del ZURBARÁN, ya, una cita ineludible y así poder sucumbir a una propuesta arriesgada colmada de buenas intenciones. Permitidme un “spoiler”: la valentía, el trabajo duro y la profesionalidad manifiesta de sus organizadores, aparte de su temeraria y desinteresada entrega para el posible público resultaron victoriosos, abriendo una nueva época para sus futuros proyectos. Enhorabuena.
ZENTE banda local con 25 años de carrera representarían al Rock burgalés, cada vez con más impacto y eco en toda la península. GUADAÑA y WILD FREEDOM enarbolarían la saludable bandera de la música nacional para dejar paso a bandas internacionales que tienen un presente y un futuro prometedor y a las que, o bien no se las ha visto en territorio nacional, o bien es difícil hacerlo como fueron los italianos rockeros KINGS OF BROADWAY, sus acerados compatriotas ARTHEMIS y los vistosos y virtuosos croatas ANIMAL DRIVE. Como guinda del pastel un ícono vocal y musical cuyo reverdecimiento es obvio en botas del legendario JOHNNY GIOELI y los inolvidables HARDLINE.
El añadido de barras de consumición con bebida y comida a un precio, no ya competitivo, sino soberanamente popular, imposible de igualar, y con gran acierto, por el resto de festivales saca cuartos, sumado a los puestos de merchandising, música para animar a cargo de dos de los Djs insignes de la ciudad (Pibe y Keeper) y un vermú que alargaría la jornada hasta más allá de las doce horas con una atrayente firma de discos por parte del americano bendecido por la voz de oro y sus secuaces, visibilizaron el crecimiento cuantitativo y sobre todo cualitativo del magno ZURBARÁN.
Los horarios no desanimaron ni al más pintado. A las 17 horas comenzaba el tinglado, y eso a pesar del calor extremo que acechaba a Burgos, como a toda España con una ola de calor que batía tristemente por el calentamiento global records históricos, pero con la diferencia de que aquí la falta de costumbre para semejante calorina en esas fechas en concreto se hacía patente en los animados comentarios de los valientes que acudimos desde primera hora. Ese calor fue el cómplice idóneo para ayudar a recabar fondos para futuras ediciones de una barra que, a pesar de lidiar y solventar sobre la marcha avatares técnicos, fluía con presteza. Otro punto positivo.
ROCK ANGELS para cubrir con mayor rigor y disfrutar de una disciplinar hermandad rockera que aglutinaba a gente de todos los puntos de España, decidió que nuestro incombustible compañero Iñigo Metalson se juntara a este servidor y enmarcaran el momento a través del gran trabajo de la lente de Jhoger Barrera. Pasen y vean.
IÑIGO METALSON:
ZENTE
Abrieron ZENTE puntuales, cuando el sol más abrasaba y aún con no demasiada gente, pero como siempre demostrando su profesionalidad, sus buenas tablas en el escenario (la experiencia es un grado) y como siempre las ganas de agradar que tienen Manolo, Peri, Kelly y Javi. A pesar del calor, nos ofrecieron un buen concierto, con 10 temazos de su discografía, que gustaron mucho a los incondicionales que nos acercamos a las primeras filas a darles un “extra de calor”, pero del humano, que el Lorenzo ya nos daba del otro. Los temas iban calando, porque se fue sumando más público de forma notable. El sonido fue bueno y la banda sonaba realmente bien, compacta, con su clásico heavy-rock ochentero.
Hicieron un repaso por casi toda su discografía, incluyendo varios temas de su último lanzamiento “V” del 2017, incluso abrieron con el tema que inicia el disco, “Velocidad” que sonó rápida y nos sirvió para calentar rápido también. De este disco, me gustó mucho cómo sonó “Mal remedio”, con ese aire más sleazy y con Javi tirando de slide. Por cierto, la guitarra de piel de serpiente le pegaba mucho al tema!
Tanto Peri como Javi ayudaban muy bien a Manolo en los coros, dando a los temas mucho color y un sonido muy guitarrero. La verdad es que el trabajo de Manolo y Javi a las guitarras fue magnífico durante todo el concierto.
Se marcaron una versión muy intensa del “Forever” de Y&T, que sonó muy bien y gustó mucho al público. Y cerraron con una dupla de temas, mezclando la divertida “Pierna creciente / falda menguante” de su último disco, con el inevitable “Gracias” de su tercer redondo “Regreso al planeta Rock”. Perfecto inicio para el Festival! Se pudo ver a todos los miembros del grupo disfrutando del resto de grupos entre el público, que siempre es una cosa que yo personalmente agradezco: que los músicos sigan siendo amantes del género y no lo toquen simplemente por profesión. Grandes ZENTE una vez más!
LUX:
KINGS OF BROADWAY
Me costó llegar a recoger la pertinente acreditación y ceder a la organización unos ricos capataces elaborados en mi puesto de trabajo en el ECU, y es que la cantidad de conocidos, amigos y admiradores de nuestra web y radio, era más que copiosa lo que ya auguraba una jornada memorable. Y puntuales saltaban a escena los italianos de corte Modern Rock KINGS OF BROADWAY. Con un solo trabajo editado hasta la fecha, bien recibido, contrastaba la edad media de sus componentes, entre los que figura Luca Cartasegna (ex SECRET SPHERE), con la sensación visceralmente fresca que desprenden sus canciones y es que, en esto del Rock, la edad es solo un número. Desgranaron con un sonido realmente bueno casi la totalidad de su disco homónimo con puntos álgidos como Berserk, Iron Lady, Through It All o First Day Of My Life.
Destaca la ferocidad vocal de su frontman Tiziano Spigno, todo un portento que animalizó sus interpretaciones en tonos más propios de grito Nu Metal para no perder ni el tono ni un ápice de melodía al recostarse en los dejes más pausados.
Dos versiones para seducir al respetable y dejar su huella con un sabor agridulce. La primera una soberbia interpretación del White Thrash Millonaire de BLACK STONE CHERRY y la segunda una algo desangelada Fool For Your Loving de la Serpiente Blanca. Esperando su evolución y marcados en la casilla de “a tener muy en cuenta”. Seguidores de NICKELBACK y ALTER BRIDGE podréis refugiaros en ellos.
GUADAÑA
19:21 y la intro de GUADAÑA ya amenazaba a nuestra tranquilidad. Mucho calor aún hasta para los gaditanos, los cual no mermó ni amedrentó durante ni un solo segundo a la cantidad de fans que se congregaron para disfrutar de ellos. Con banderas y camisetas quedaba claro que su inclusión en el festival no fue un golpe de suerte sino una apuesta segura. Heavy Metal con aderezos de géneros más potentes y una dualidad vocal evocadora entre el salvaje Salva Sánchez y la formidable Glory Romero, atronaron con un sonido realmente bueno, colmando las expectativas de sus incondicionales y de todo aquel que ya se arremolinaba por allí para formar parte de un evento histórico para la ciudad.
Visualmente añadían parafernalia como caretas, un martillo de Thor en El Dios Del Trueno, el bastón muy a lo Drogas de Salva junto a elementos de clara devoción por su arte servidos en una simpatía y cariño hacia los suyos y los que nos sumamos a su propuesta que coronaron con temas de neta pose Thrasher como Némesis y su declaración de intenciones metaleras en Ser Uno Mismo, Adrenalina o Como Hermanos o su personal tributo a BATTLE BEAST. Salieron a conquistar y lo consiguieron como los auténticos guerreros que demostraron ser.
ANIMAL DRIVE
Tras los cambios pertinentes y manejando un disciplinado cumplimiento de los horarios dentro de lo posible, llegaba la hora de uno de los platos fuertes de la velada. Llamaron mucho la atención con la edición de Bite! en 2018 y se hizo visible el talento vocal y compositivo de unos de los nuevos artistas llamados a liderar el futuro, Dino Jelusic. Crucé unas palabras con él en el backstage y me transmitía que estaba cansado por infortunios del viaje, cosa que no afectó ni lo más mínimo a su actuación.
Las caras de felicidad y armonía entre la gente no pretendían velar todos los comentarios que se vertían ya sobre la banda. “Que si estos son cojonudos”, “que si el cantante es la bomba”, “que era un lujo ver cosas así en Burgos y gratis”, antes de salir a escena ya se erigían vencedores para un sector nutrido de gente. De las centenas pasábamos a cifras más que importantes y a las 20:45 una de las plazas donde disfruté de mi infancia ya era un hervidero comunitario de buen rollo y festividad, recibiendo con los brazos abiertos a la sensación croata.
Goddamn Marathon acentúa su posición y deja ya de entrada boquiabiertos a propios y extraños. Dino sube, baja, modula, exprime y descarga su voz a antojo, cabalga sobre su teclado cuando se requiere y queda perfectamente cubierto por unos compañeros de lujo pero que en mi opinión, en tramos concretos, necesitarían reforzar la contundencia de su oferta discográfica en directo con un guitarra más, y es que mezclar en sus influencias a PANTERA, DREAM THEATER o JORN requiere valentía y orgullo pero también un muro contra el que golpearte.
Had Enough nos sacude con su vacile WHITESNAKE y se meten en su bolsillo a TODO el mundo con sus interpretaciones incluidas en Back To The Roots de los míticos Uncle´s Tom Cabin de WARRANT y Monkey Business de SKID ROW que suena a gloria en boca de Dino.
Hands Of Time, Father o Fade Away en clave más melódica emocionan, demuestran su labor técnica aupada por el formidable trabajo de los profesionales del sonido contratados (chaupeau) y relanzan la visceralidad exhibida en The Look de ROXETTE que asombró a los que desconocían su inclusión en el repertorio de la banda, Devil Took My Beer o una pletórica Tower Of Lies (I Walk Alone).
Ivan Keller, su hacha, decidió bajar y arrimarse a los asistentes lo que se añadió a las poses de Rockstar que ya el cuarteto adoptó desde el primer momento. SOBRESALIENTES.
IÑIGO METALSON:
ARTHEMIS
Tenía muchas ganas de ver a los italianos ARTHEMIS, una banda que yo desconocía, pero que en las últimas semanas había escuchado mucho. Su propuesta mezcla el Heavy Metal más clásico, con partes más Power-metaleras, otras más Thrasheras e incluso algún momento más progresivo de mayor evidencia en el directo que quizás en los discos de estudio. A pesar de contar con 8 discos de estudio centraron su concierto en los tres últimos discos, que son los que han editado con su cantante actual, Fabio. La entrada de Fabio es la que ha hecho que el grupo gire un poco más a la crudeza del Thrash en detrimento de su propuesta inicial más Power.
El concierto gustó sobre todo a los que conocíamos las canciones y me imagino que se le pudo hacer algo lineal, al final, a la gente que no les tuviera tan controlados. Tanto Andrea (guitarra y líder fundador) como Damiano (bajo) demostraron un manejo envidiable de sus instrumentos y una calidad tremenda. Se gustaron y dieron ese punto más progresivo a algunas de las canciones, aunque como digo, igual a parte del público más ávido de la inmediatez y la contundencia, se les pudiera hacer algo frío. Aunque supieron suplir esa inmediatez con algunos de sus temas más agresivos y también con las dos versiones que tocaron, curiosamente de bandas muy alejadas de su propuesta, como son DEEP PURPLE (sonó tremendo el “Burn”) y LED ZEPPELIN (grata sorpresa el genial “Whole lotta love”).
Personalmente los temas que más me gustaron fueron el inicial “Undead” de su último disco “Blood-Fury-Domination”, temazo duro, contundente y con un buen estribillo, coreable. Brutal el “Scars on scars” del disco “Heroes” (quizás su disco más completo) con unos buenos coros y terminando como un auténtico pelotazo del mejor Thrash Metal y el “We fight”, que da título a uno de sus álbumes más cañeros.
Detalle llamativo fueron las luces que tenía Damiano en el mástil de su bajo y que se iluminaban en alguno de los momentos dónde hacía volar sus dedos por dicho mástil. Como punto curioso, el bajista grabó un montón de vídeos con su móvil, del público, de la banda… se supone que ellos son los que tienen que ser grabados, y no al revés… pero entiendo que estarían disfrutando de la buena respuesta del público y como dijeron era su segunda vez en España, tras un paso anterior por Ibiza, con lo que fliparían de tocar delante de tanta gente, en un país dónde son desconocidos.
Hay que decir que su posición en el Festival les dio un punto a favor y otro en contra. Como punto favorable decir que ya durante todo el concierto, la oscuridad les permitió desplegar un interesante juego de luces que por otro lado seguro que dificultó mucho la labor de nuestro querido compañero Jhoger a la hora de sacar fotos, ya que tiraban mucho de flashes y oscuridad. Por otro lado, les tocó bailar entre los que quizás fueron la gran sorpresa del festival, los geniales ANIMAL DRIVE y los grandes cabezas de cartel, HARDLINE. Eso hizo que mucha gente fuera a repostar combustible, cenar algo y al principio se notó algo menos de gente. Pero acabaron por todo lo alto, con un montón de público, lo que indica que el concierto gustó.
LUX:
HARDLINE
Y llegó la hora. La hora bruja tras los fuegos artificiales que colorearon la festividad local en un cielo infinito al que miles de cabezas habían cedido su atención previo a encararse con uno de los cabeza de cartel más impresionantes anunciados nunca para esta ciudad, con perdón, en los noventa, de BRYAN ADAMS o DEEP PURPLE con JOE SATRIANI, ya ha llovido,ya…
Le di un abrazo a un Gioeli tremendamente animado en los últimos minutos antes de subir al escenario. Una anécdota grata para mí en la que he de remarcar la energía que me transmitió: sincera, humana. Su mano derecha Alessandro Del Veccio me regaló exactamente lo mismo, endorfinas a tope. Me dirigí al foso con los míos, mis amigos, mis amores, mi familia y mis compañeros y vibré antes de sonar una sola nota. Todo era magia en el ambiente, un sueño ver a menos de cien metros del hogar donde me críe a una de las formaciones, evidentemente alterada con los pasos del tiempo, pero que en 1992 se tatuó en mi alma para siempre con aquella obra capitular llamada Double Eclipse.
Salieron desbocados, brillando, congeniando con todo aquel que posara sus ojos en ellos y con un sonido prácticamente inmaculado, aunque sí que hubiera dado un poco más de volumen a un increíblemente agradable en lo personal y excepcional con su instrumento, Mario Percudanni.
Take Me Down, Life´s A Bitch, Dr Love, Everything, la cover convertida en propia y cumbre del Hard Aor, Hot Cherie, fueron algunos de los regalos de aquel inolvidable plástico, pero la cosa no quedó ahí, Fever Dreams de Danger Zone o Place to Call Home de su reciente Life. Una complicidad escénica memorable, ejecución de cátedra y un Johnny rozando la perfección aun a pesar de algún acuse vocal que suplía con las tablas que entregan las giras constantes en más de 27 años de carrera. Un monstruo escénico que inundaba con vaciles al respetable, a sus compañeros alternado con reflexiones personales de agradecimiento que mostraban más a la persona que al artista. Loable.
Uno de los puntos más criticados por algún die-hard fan o por los más motivados por la fiesta fue que en el núcleo central de su atracción incluyeran un despliegue baladístico conformado por In The Hands O f Time y Page of your life. Algunos querían más caña a pesar de que este momento sonó de auténtico lujo. En mi opinión, más allá de mi predilección por la banda, este acto fue un acierto porque no he dejado de escuchar comentarios, y ya hace trece días de esto, de gente ajena al Rock, de gente de entre 60 y 70 años que se dejaron caer por allí, comentarios acerca de lo hermoso que fue ese sonido prístino entrelazado a la maravillosa voz de este hombre, algo que remarcaban de forma rotunda.
Tras la presentación de la banda y sus mini solos aún quedaba fuerza para que el expresivo y contundente batería Marco Di Salvia aporreara su kit con los primeros compases del Painkiller de JUDAS PRIEST preludio más que vitaminado para una coreada, entre caras de alegría y satisfacción por parte de los asistentes, Rythm From A Red Car. Matrícula de honor para unos HARDLINE completamente entregados ante los miles de fans que allí disfrutaron de un momento épico.
WILD FREEDOM
Para cerrar el festival los catalanes WILD FREEDOM se tomaron el mundo por montera y junto a su juventud y desparpajo, arrasaron con su Heavy – Hard –Sleazy huracanado el suntuoso escenario que había cobijado una de las mayores veladas de nuestro rollo. Van cogiendo tablas y tienen ganas de agradar. Ian Wilde es un vocalista con proyección, al que amansar levemente su voz le hará un favor ya que a ratos sus imponentes chillidos traspasaban demasiado nuestros tímpanos, pero es que el ímpetu juvenil y la situación pintaban calvas, comprensible.
Caían temas de su Set The World On Fire como Full Of Love, No More Gentlemen o Dancin´With The Devil y la gente seguía con la fiesta. Ellos los músicos y el Titanic hundiéndose pero nada importaba, tan solo disfrutar. Con la cover del señor Sembello, Maniac, se metieron en el bolsillo al que aún se resistía y ellos, como si nada, repartieron hachazos hasta el final.
Grandes cosas podrán venir de ellos, con calma, con ganas y con su frente claro, WILD FREEDOM sonarán, vaya si sonarán por todos los rincones.
Las barras se mantuvieron abiertas con más buena música, y aunque el norte hizo gala de su presencia cogiéndonos a más de uno sin nuestra habitual chaquetilla de verano (¿sabes cómo se conoce a un burgalés en la playa?), bajando ostensiblemente la temperatura, aún se prolongó la jornada. No podía ser de otra forma.
El ZURBARÁN había llegado, peleado y conquistado, y eso era un motivo más de celebración.
Para resumir y concluir esta extensa crónica, tan sólo puedo manifestar mi más sincera admiración para una organización que previó cada aspecto a cuidar y se afanó, cosa que no entiendo como otros empresarios gigantescos no hacen en consabidos festivales, en facilitar el deleite de tod@s: baños necesarios, precios populares, seguridad fiable, planes de evacuación controlados, puntos de recogida de basura por doquier, atención personalizada, sonido fantástico, escenario imposible de olvidar, bandas a la altura, comida, bebida, entretenimiento entre conciertos, trato de altura tanto para las bandas (como muchas me manifestaron) como con la prensa, rápida solución de problemas técnicos, juegos de luces vistosos y elegantes y profesionales técnicos incansables… Todo para un festival GRATUITO en una bella ciudad de gastronomía contrastada, cómodos desplazamientos y situación estratégica. Tomen nota aquellos que desean hacer de los festivales un yincana económica y personal para el asistente y un negocio descompensado entre el que paga y el que ofrece.
ENHORABUENA DE CORAZÓN.
Pd: He de destacar que antes de que el alba se alzara todo estaba recogido, demostrando el compromiso tanto de los asistentes como de la organización, cosa que en el resto de la ciudad no se cumplió. Ejemplo de civismo y camaradería para esos que piensan, aún, que somos los malotes.
BRAVO.
Crónicas: Jesús Alijo «Lux» / Iñigo Metalson
Fotos: Jhoger Barrera