Desde el sello Aor Heaven nos ha llegado con bastante adelanto este “Tabula Rasa”, que se editará en 29 de Enero de 2016 y que supondrá el segundo trabajo de los suecos Wigelius. Este trabajo está siendo recibido por todos los críticos del rock melódico como uno de los mejores discos de este año aunque no podrá ser así considerado en las listas de Tops de 2015. Recuerda que es para principios de 2016.
Imagino que si estás leyendo esta reseña es que echas tiempo en estar al corriente de las noticias y de los detalles de nuestro amplio estilo musical, y que por lo tanto sabrás que Wigelius es un grupo muy joven formado en 2011 y que en 2012 tuvieron su debut con el disco “Reinventions”. Quizá puedas saber que el grupo fue formado por el cantante Anders Wigelius junto a su hermano Erik (batería), el guitarra Jake Svensson y el bajista Chriss Pettersson. Esto reconozcámoslo es para nota… Lo que si puedes recordar gratamente es aquella canción que abría ese debut y que llevaba como título “Angeline” y por ello el recuerdo del sonido tan escandinavo y fino del grupo. Personalmente aquel disco me gustó aunque me pareció con demasiadas similitudes a Work of Art pero sin ser ellos.
Para este segundo trabajo el grupo sigue casi con los mismos integrantes con la única excepción de la incorporación del bajista Patrik Janson para sustituir al anterior. También han continuado con su misma línea musical que suena, a pesar de lo dicho, muy propia, pero haciendo en algunos momentos muchos guiños a americanos Toto y a los también suecos HEAT. Puede ser que ambas bandas, WOA y HEAT, personalizasen perfectamente lo que el rock melódico moderno supone y que por ello, y aunque otras bandas vengan con muy buenas canciones, siempre vamos a encasillarles como similares y muy influenciados. Vaya por delante que este comentario no es para decir que Wigelius son una vaga copia, no, para nada es así mi idea. Es sencillamente que dentro del melódico hay tanto y tan bueno que a veces sitúo vagamente muchas coincidencias a la hora de escuchar a los grupos. Me pasa lo mismo con Care of Night, a quienes les posiciono como aventajados dentro de mis gustos de este 2015 con su fantástico disco y que también he sentido presentes en este segundo disco de Wigelius.
Después de esta humilde reflexión puedo decir que este “Tabula Rasa” dispone de muchos alicientes para el oyente de rock melódico porque tiene de todo y siempre muy bueno.
El título del disco “Tabula Rasa” es una expresión del latín que significa lo mismo que en nuestros días decimos cuando usamos “hacer borrón y cuenta nueva”. No estoy de acuerdo con ello puesto que para mí el disco es una continuación lógica de aquel “Reinventions” pero mucho mejor, con mucha mayor profundidad y calidad y con un mayor y más amplio campo de visión en el que diez de las doce canciones son notables altos y donde solamente he encontrado algunos arreglos muy puntuales y poperos en dos canciones donde he notado un nivel menos agradecido para mi gusto.
El disco tiene para mi entender un comienzo global que dura hasta el quinto tema. De carrerilla suenan “Do It All Again», “Déjà Vu”, “These Tears I Cry”, “Long Way From Home” y “Set Me Free”. Disociables y casi como imperativo estas cinco canciones presentan lo mejor del grupo. Un tema muy movido y dinámico, otro para consolidar el inicio, otro más relajado y tirando de recursos típicos del AOR, y finalmente el “Set Me Free” para salirse con un estribillo magnífico que hace de él el mejor tema del disco. Así han transcurrido casi sin darse cuenta estos primeros veinte minutos de escucha.
Las dos siguientes canciones son “Yesterday’s News” y “Time Well Wasted” que marcan una pequeña diferencia por ser mucho más directas y de fácil asimilación. Esta última es muy Care of Night y deja muy al descubierto que la producción de éstos fue hecha por los dos hermanos Wigelius. Ahora es cuando podemos pensar en lo del huevo y la gallina y ver que nada es porque sí.
Con “9 Out Of 10” nos situamos en la canción más pop del disco y con “Run With Me” estamos en la vuelta a los buenos Wigelius. Un sonido cuidadísimo y una composición que te lleva de la mano por cada parte de la canción, para no dejar resquicio o idea nueva que añadir a lo que estás oyendo. Todo está tan en su sito que cualquier comentario es para redundar positivamente sobre lo que los cuatro músicos están tocando.
“Love Is The Key” y “Please Please Please” me han parecido las peores del disco y las he visto casi como lo nuevo de One Direction pero grabado por Wigelius. Pobres y sin transmitir lo que el grupo sabe hacer se les ha marchado de la mano un poco este final de disco. Parece como si la gasolina hubiese ido desapareciendo. Hasta el estribillo del “Please Please Please” es descafeinado y toma de otro muy conocido pero con un replique de please, please please muy lejos del nivel que ellos tienen. El último tema es la balada “My Cheri” que es cantada a capela con el suave acompañamiento de un teclado y una acústica. Esta canción pone la dulce guinda a un disco que gustará y mucho cuando tengas la oportunidad de tenerlo.
La espera será larga ya que ten en cuenta que será lanzado el próximo 29 de Enero de 2016, pero seguro que merecerá la pena. En cuanto puedas no lo dudes y ve a por él.
Luis Maria Catediano