Comenzábamos el último día del festival con el rock sureño de Dan Baird & Homemade Sin que venían a presentar su country rock con aires red neck’s en sus 45 minutos de actuación delante de los más “madrugadores” y aquellos que ya decidían emprender la última jornada de festival.
Texto y fotos: David Aresté
La banda que reunió un gran número de adeptos no se amedrentó delante del horario ni del público con un Dan Baird derrochando carisma y un Rick Richards a la guitarra realmente elegante e intenso. Sonaron temas como “Woke up Jake”, “Thin Disguise” o “Crooked Smile”… que aportaron los sonidos clásicos a la jornada. Los tendremos este verano de gira por España así que será una buena ocasión para degustarlos con repertorio completo y un ambiente más cercano.
El escenario principal se abría para el trío de mancos “The winery dogs” Mike portnoy, Billy Sheehan y Richie Kotzen que venían a presentar su “Hot streak”. El sol seguía apretando pero eso no fue problema para el trio de super músicos, sus composiciones técnicas y pegadizas combatían entre el sonido y el escenario enorme que muchas veces se veía demasiado grande para el trío.
Alguno de los temas fueron “Oblivion”,”Time Machine”,”Elevate” o , una hora de rock con mucha técnica siendo la primera del día, ya que luego nos esperaban Steve Vai y Symphony X.
Es obligatorio pasarse por la carpa del festival alguna vez ya que siempre puede haber alguna sorpresa encima del escenario… Una de ellas fue Monster Truck y otra que pillamos fue Pedalens Pagar, el grupo local hizo patente la fiesta del festival entre los suyos durante su actuación, aparte que la carpa estaba hasta los topes para ver a los autóctonos.
Temas en sueco de rock, rockabilly interpretados con solvencia por la banda y rematadas por un frenético Lasse a las voces que arengaba a los allí presentes. Nos quedamos con ganas de más al ver todo aquel espectáculo de energía y buen rollo. Sin duda una de las rarezas del festival y a saber cuando los volveremos a ver.
Otro de los shows especiales del festival fue el paso de la gira del 25 aniversario del “Passion and warfare”de Steve Vai tocándolo en su integridad. Tal y como hizo en las fechas españolas comenzó con una serie de clásicos como “Bad Horsie”,”Racing the world” o “Tender Surrender” para pasar a tocar de forma íntegra el disco que comentábamos. Así que uno detrás de otro fueron cayendo grandes temas como “TheAnimal”, “Liberty” o “Ballerina 12/24”, acabando con “For the love of god” y “Taurus Bulba”.
Al igual que The Winery Dogs tocaron en el escenario grande, aquí eran uno más pero el conjunto seguía pareciendo pequeño… sin telón, escenografía, sin nada… El matemático de las 6 cuerdas Mr.Vai embelesaba a los allí presentes mientras queBynoe, Weiner y el salvaje Jeremy Colson le hacian la base para que el solista se despachara agusto. En su paso por España puntualizó que nunca se había atrevido a tocar este disco entero ya que era muy complicado, pero que con esa banda había llegado el momento, así que ya os podéis imaginar el nivel de ejecución.
Ya en el Lemmy Stage, era el turno de presenciar otro álbum interpretado en su totalidad, el Underworld de Symphony X. Los americanos dentro de su gira de presentación, interpretaban el disco de incio a fin porque era como tenían sentido las canciones tal y como nos decía el titánico Russell Allen. Aunque con sol, el Lemmy les acompañó más a nivel de sonido consiguiendo algo más compacto y potente, tal y como hicieron con Epica.
Todos los temas sonaron fantásticos, “Nevermore”, “Kiss of fire”, “To hell and back” destacando una banda perfecta y un Russell Allen sobrenatural. Acabaron con tres bises al igual que hicieron en España, “Sea of lies”, “Out of the ashes” y “Set this world on fire”.
El Sweden también presenció el paso final de Udo Dirkschneider tocando temas de Accept, antes de pasar a interpretar solo temas de su discografía. Volvíamos a irnos al escenario principal y esta vez más que justificado con una banda pletórica, el público receptivo, telones de escenografía y llamaradas en el escenario.
El pequeño UDO comandó esa ceremonia del recuerdo de los clásicos de Accept que la gente iba aclamando cada vez. Algunos de los que sonaron fueron “Princess of the dawn”, “Breaker”, “Restless and wild” atacando la parte final con “Fast as a shark” ,“Burning” o “My way” sonando como una auténtica apisonadora.
Rápido a la carpa para ver el blues incendiario de Eric Sardinas, técnico a más no poder el brujo de Florida con su dobro gigante tenía a todos encantados por su visceralidad interpretativa de cada uno de sus temas. Esta vez un power trio que suenan bien, en el sitio correspondiente y la carpa hasta la bandera, no creo que esperasen todo tan perfecto.
Con 18 años ya en activo y 7 discos a sus espaldas la intensidad de Eric sigue siendo potente desde el primer al último tema. Amado por los suecos, les daba igual lo que tocase, un blues desde las tripas o un corre mástil en medio de un solo, a la vista está el aforo de su concierto.
Lo de King Kobra en el Sweden Stage quedó como un teatrillo del amigo Shortino, que apareció bajo unas condiciones bastante apáticas mientras que el incansable Carmine Appice se hubiese tirado tocando dos horas.
Su paso por España no fue tan desastroso pero aquí en cambio como decíamos fue bastante deplorable. Cada miembro de la banda estaba viviendo su concierto, con un Shortino a verlas venir, el bajista super activo y Carmine Appice como decíamos muy implicado y con una pegada perfecta. No recordamos como fue pero al acabar el festival publicaron una nota aclarando como vieron ellos el concierto. Sonaron algunos temas como “Hunger”, “Live forever” e “Iron Eagle” entre multitud de solos como decimos, para rellenar algo muy soso.
Anthrax aparecían al Lemmy Stage para presentar su último “For all kings” editado por Nuclear Blast ante una audiencia más que notable y que podría haber pasado al principal. Los de Belladona, Ian y compañía con sus 36 años a la espalda viven una segunda juventud y estuvieron y están año tras año en algún festival europeo sacando a pasear su thrash endiablado.
Presentando “For all kings”, tocaron “You gotta believe” y “Evil Twin” de ese último disco ante la locura del respetable mezclado con temas más clásicos como “Caught in a mosh” o Antisocial”. Belladona parecía una peonza sin parar por el escenario, Ian tan intenso como siempre y Frank Bello al bajo completamente desquiciado. Se nota que eran, son y serán uno de los big four, siempre es un gusto ver a Anthrax en directo.
Si 2016 fue el año de un grupo, sin duda fue el año de Sabaton: giras, festivales, sold out’s y… ser cabeza de cartel del último día del Sweden Rock, cosa que no puede decir mucha gente. Lejos de ser uno de los grupos fetiches del festival, no queremos dejar pasar que también se lo ganaron, con edición de grandes discos, y la repercusión exponencial que están teniendo, y por si fuera poco además en su país.
Sin escatimar en gastos, tuvieron fuegos en el escenario, la pantalla enorme del escenario principal iba enseñando las portadas de los discos que estaban tocando y Hannes a la batería estaba subido en su ya famoso tanque. Sonaron temas como “Swedish Pagans”,”Cliffs of Galipoli”, “The art of war”, que coreó todo el mundo poniendo el punto más emotivo del festival… Todo ese patriotismo sueco que se manifestó en el concierto de Sabaton por la atención de todo el mundo se remató con el ya clásico castillo de fuegos que ponen siempre para el concierto que cierra el escenario principal el último dia.
Ya habíamos visto el show de los suecos varias veces en estos últimos años, así que nos fuimos al Lemmy Stage para coger sitio a la última golosina del festival, el Michael Schenker Fest. Se trataba de un concierto especial del larguirucho de los Schenker junto a los tres cantantes que ha tenido en toda su carrera: Gary Barden, Grahamm Bonnet y Robin Mc Auley.
Yendo de menos a más, Gary comenzó bastante cohibido, Bonnet siguió muy intenso aunque con dificultades para llegar a algunos tonos y elque estuvo mejor fue Mc Auley con un gran chorro de voz. Alguno de los temas que interpretaron fueron “Armed and ready”,”Assault Attack”,”Dancer” o “Doctor Doctor” y “Rock Bottom” para final de fiesta. Un gran fin de fiesta coronado por la clase de Schenker y sus compañeros de banda que rozaron un altísimo nivel.
4 días llenos de música, buen rollo, buen ambiente, buen tiempo (esta edición), lo que viene a ser un festival de verdad…¿que más necesitas para ir?
