SINESTRESS
Sala Nazca Live, Madrid, 2 de febrero de 2019
Crónica y fotos: Daniel Arriero
Te encuentras conversando tranquilamente con varios amigos y conocidos pero, pese a lo relajada que pudiera parecer la escena, un ambiente de expectación, de ligero nerviosismo se hace notar. Se apagan las luces. Son las nueve de la noche. Y a partir de ahí, la magia. Bajo la deslumbrante luz de los focos, la ilusión de unos músicos que desean con todas sus fuerzas ofrecer lo mejor de su talento, dejarse la piel sobre el escenario. Dar todo de ellos mismos. A pie de las tablas, el cariño y el apoyo de sus seguidores que, por su parte, también buscan disfrutar al máximo de un concierto tan especial para la banda ya que, además de ser la presentación de su formidable último trabajo “Miedo”, también es la celebración de su décimo aniversario. Y, sobre todo, lo que hacía esa noche tan especial era que el espectáculo iba a ser grabado para su posterior edición en blu-ray, algo rarísimo incluso entre las bandas más renombradas, que siguen apostando en exclusiva por el dvd.
La canción elegida para dar la bienvenida al concierto no podía ser otra que “Grito en el Silencio”, primer tema de su más reciente obra. Ese medio tiempo rebosante de melodía, con un estribillo que, si en disco ya era excepcional, en concierto se convierte en un himno perfecto para corear y para que, desde el primer instante, logre atraer la total atención de tu público y que se sienta parte activa e imprescindible de tu música. Y ya desde el principio se percibió que la banda estaba a un nivel magnífico, con el increíble Chimo a la voz, los siempre fantásticos Alejandro Penedo y Kiko a las guitarras, el toque brillante de los teclados de Miki, que dota a Sinestress de su especial personalidad y una base rítmica de quitarse el sombrero como son José Castilla al bajo y Diego Belmonte a la batería.
“Mi vida entera en este bar”, quinto tema de su álbum debut, continuó la total hermandad entre banda y audiencia. Es una canción clásica en los conciertos de Sinestress y perfectamente conocida por sus seguidores. Yo creo que fue una muy buena elección porque quizá empezar con dos temas nuevos seguidos hubiera sido más arriesgado.
También del disco objeto de presentación fue el tercer tema de la noche, “Exiliado del mundo”, cuya letra desgraciadamente está de plena actualidad, tal y como Chimo se encargó de recordar en la breve introducción del mismo. Es una grandísima canción que creo se convertirá por méritos propios en un clásico en los conciertos de la banda.
El primer tema elegido de su segundo trabajo “Fase 2” fue “Un mundo sin ti”, que contiene una de las mejores letras que ha escrito el grupo, sobre el duro tema del maltrato infantil.
Una de las sorpresas de la noche fue la inclusión del tema “Pequeño héroe”, ya que es una canción no incluida en ninguno de sus trabajos oficiales y que solo se puede encontrar en el maravilloso y recomendable recopilatorio “Iberia metálica”. Es un fantástico tema y me alegra sobremanera que por fin vaya a formar parte de la discografía de la banda, cuando se publique este directo.
Atención, todos en pie para recibir a la siempre sensacional Ana Gárcol y a su inconmensurable voz. Es cierto que tengo una especial debilidad por esta cantante. Siempre he dicho que si la música en este país fuera justa, Ana Gárcol debería estar en lo más alto. Solo hay que dejarse llevar por el dueto inmejorable que interpreta junto a Chimo en el tema “Entre tú y yo”. Vaya par de voces. Qué buena química tienen siempre en el escenario estas dos bestias de la música. Magia, simplemente magia.
“Miedo”, tema que da nombre al más reciente trabajo, seguido de uno de los que no pueden faltar en una actuación de Sinestress, como es “La banda del turco”, mantuvieron el ánimo del público en lo más alto.
Cambio de tercio hacia mitad del concierto, con unos minutos para la intimidad y los sentimientos, con las emocionantes “Me enseñaste a andar” y “Solo queda luchar”, que sigo pensando que es una de las mejores baladas que jamás se han compuesto en este país y que, por supuesto, me puso los pelos de punta una vez más, como cada vez que la escucho.
“Huye conmigo” nos devuelve a la velocidad y potencia, con su fantástico y coreable estribillo, que el público disfrutó de lo lindo.
Desgraciadamente, Miguel Oñate no pudo asistir como invitado por compromisos profesionales, para deleitarnos con su talento en “Reina de la suerte”. Chimo defendió el tema perfectamente pero, acostumbrado a escuchar la canción a dos voces, sí es verdad que lo eché en falta.
El rock and roll de “América Latina” y la más preciosista y sentimental “Lluvia”, ambas de su último trabajo, fueron las siguientes canciones interpretadas.
Nos íbamos acercando al final del concierto y tenían que terminar por todo lo alto. El clásico “Sobran las palabras” de su primer LP y “Haz que todo se detenga” y “Años de rock” que interpretaron como un sola pieza, dejaron al respetable con ganas de más. Aquello era una auténtica fiesta y no podía acabar así. Pero es que la fiesta estaba abajo y arriba del escenario. Todos, músicos y púbico, estábamos disfrutando de lo lindo.
Tras unos breves instantes, la banda regresó para descargar los que, ahora sí, serían los últimos tres temas del concierto, “Guerra sin cuartel” y “Lejos de todo” que eran los únicos que quedaban por presentar de su último disco, que fue interpretado en su totalidad y, claro, como no podía ser de otra forma “Las botas gastadas”, que fue disfrutado por todo el público como si fuera el primer tema de la velada.
Pero aquello había llegado a su fin tras casi dos horas de concierto. Dos horas que se hicieron tremendamente cortas. Sinestress nos había regalado un concierto fantástico, maravilloso. Con un público entregado desde el principio y con una banda que disfrutó tanto o más de una noche tan especial; en la que dieron el máximo. Solo había que ver las sonrisas de los allí presentes.
Yo ya estoy deseando visualizar el blu-ray, para volver a disfrutar de lo que vivimos todos los que nos acercamos a la sala aquella noche.
Daniel Arriero
