MIKE TRAMP
Sala Kithai, Madrid, 18 sept. 2019
Crónica y fotos. Raúl Blanco
El gran Mike Tramp, uno de los mejores vocalistas de Hard Rock aterrizó en Madrid en una extensa gira acústica junto a su “hermano” Marcus Nand ofreciendo un repaso a su historia desnudando por completo sus temas más conocidos y dándoles un aire intimista y en algunos casos country. White Lion, Freak Of Nature y por su puesto su carrera en solitario tuvieron sus momentos a lo largo de dos horas de show que bien podría haberse llamado “An evening with…” ya que el bueno de Mike hizo de perfecto showman contando anécdotas sobre su trayectoria y sobre los temas interpretados.
Tras una bienvenida disculpándose por el largo periodo sin venir por aquí, “más largo que un día sin pan” como el mismo dijo, la primera en la cara, “Lonely Nights”. Y es que empezar así de fuerte ya es toda una declaración de intenciones, y más si después de “Trust in Yourself” haces un “Hungry”, para que quieres más. Pero además de las canciones, lo realmente atractivo de la noche empezaron a ser los speechs de Tramp que en ocasiones eran traducidos, aunque “no cobro por esto”, por el bueno de Marcus.
Como posiblemente ya haya pasado la última fecha cuando leáis esto no os voy a destripar nada si os digo anécdotas como que tras correr a casa de un productor a enseñarle “Wait” emocionado por lo que él creía un tema brutal su respuesta fue “bufff bueno, mañana lo vemos” así que fue a la compañía de discos y le dijeron “Si, está bien pero…NO ES SKID ROW!”. O que con Mabel casi estuvo a punto de telonear en Alemania a Rainbow con Dio pero cuando vieron la prueba de sonido les dijo a sus compañeros “vámonos de aquí, no podemos hacer esto” y se fueron.
Alguna de las anécdotas más curiosas a las que además añadió un punto humorístico fue a “Hymn for Ronnie” dedicada a Ronnie James Dio sobre la cual contó que su hija al escucharla le pregunto que sobre quien hablaba porque sentía que era alguien importante para él, “uno de mis ídolos de Hard Rock, Ronnie James Dio”, su hija, ni corta ni perezosa le contesto “¿puedes escribir una a mi ídolo? Justin Bieber”…la respuesta, “que clase de puto ídolo es eso”, a los días la cría le dijo “papi, tengo un nuevo ídolo” “espero que no sea Enrique Iglesias!! No le voy a escribir un tema”. Con “No closure” la anécdota fue incluso más personal ya que nos comentó que es un tema dedicado a su padre y su hermano mayor, ambos fallecidos y que no se hablaban desde hace muchísimo tiempo con lo que “se fueron de este mundo con muchas cosas por resolver”.
Lo cierto es que como no podía ser de otra forma los temas más vitoreados fueron los de White Lion, de hechos son los que me llevaron allí pero, aquí es donde tengo la lucha de la mente contra el corazón. No puedo engañaros, no puedo deciros que fue todo maravilloso. Si, la voz de Mike impresionante, verle es un show tan cercano e intimista es un regalazo pero, sabéis eso que esperas de un acústico, pues no lo encontré en toda la noche. “Broken Heart” o “Radar Love”, por ejemplo, sonaron muy extrañas, con un ritmo “raro” que no consiguieron ese punto de alegría que tienen y deberían tener. Por otro lado, “When the Children Cry”, cada vez que la escucho en casa se me ponen los pelos de punta y pensaba, madre mía escuchar esto en acústico el miércoles, espero que no me dé la llorera…pues nada de nada, por decirlo un tanto cursi, no consiguió pellizcarme el corazón como esperaba ni mucho menos.
Total, que sí, no puedo decir que fuera malo ni muchísimo menos, fue una gozada, el buen rollo que tienen Mike y Marcus salta la vista y la cara y actitud de Mike dejan bien a las claras que está haciendo lo que realmente quiere y lo está disfrutando muchísimo pero, ni los temas rápidos me movieron ni los lentos me hicieron estremecer. Puede que fuera yo, quizás el ambiente pero, al final, el concierto se quedó en un espectáculo genial sin llegar a convertirse en lo que debería haber sido, una cita inolvidable. No quiero cerrar esta crónica sin darle la enhorabuena y las gracias al bueno de Mike Tramp y a Marcus que como prometieron sobre el escenario, no se fueron de la sala hasta que el ultimo que quiso se hiciera la foto con ellos y se llevara sus discos firmados. Cuantos deberían aprender de esta actitud. Inmenso Mike.
