Caliente y rebosante de melodías he recibido el tercer disco de Khymera. Una idea que comenzó en 2003 en las cabezas de Daniele Liverani (Cosmics, Twinspirit, Prime Suspect) y el que fuera cantante de Kansas, Steve Walsh, y que dieron a luz el autotitulado primer disco. Un grupo en el que se subió en marcha el bajista/productor de Pink Cream 69, Dennis Ward. Eso fue en 2005 y lo hizo para encargarse de poner su voz solista al segundo disco “A New Promise”, al que siguió en 2008 “The Greatest Wonder”.
Desde ese momento hasta ahora han transcurrido siete años sin noticias de Khymera. A mi parecer demasiado tiempo pero quien sabe si a veces esto puede ser bueno para “limpiarse” y así poder volver con ideas más frescas. Este paréntesis ha servido para renovar el grupo por completo y para que Dennis Ward haya trabajado con sus Pink Cream 69, con Place Vendome, con Sunstorm y hasta montó Unisonic con Michael Kiske y Kai Hansen. No está nada mal, ¿verdad?
En esta vuelta Dennis Ward ha contado con Felix Bohnke a la batería, con el guitarrista Michael Klein y con el teclista Eric Ragno, además de Jim Rybkost quien ha tocado piano y cantado en algunos temas los coros.
Ahora estamos en 2015 y éste que nos ocupa es el cuarto disco que Khymera nos proponen bajo el título de “The Grand Desing”. Un disco que se editará el próximo 4 de Diciembre en el sello Frontiers y que bajo mi punto de vista va a gustar mucho a la gran mayoría de los que tengan el gusto de oírlo. ¿Por qué digo esto? Pues sencillamente porque es bueno a rabiar, pero puede ocurrir que no siempre estemos en el mismo momento para recibir y percibir lo que el mercado trae. Que no siempre tengamos las mismas ganas de llevarnos el mismo estilo de música en nuestro teléfono y en muchas ocasiones las personas cambiamos o simplemente vemos de otro modo lo que hace unos años, o incluso menos, meses, veíamos de otra forma. No sé si me explico… Ahora me gusta esto y quizás mañana no. ¿Por qué? Vaya usted a saber. Lo único que veo en este trabajo es buena música, muy bien hecha y excelsamente bien tocada.
El disco tiene doce canciones como doce soles que seguro iluminarán y calentarán una parte del invierno que hemos comenzado con frío extremo. La Intensidad, melodía y los buenos detalles por parte de todo el equipo Khymera que estoy convencido no dejará indiferente a quien lo escuche. Para ello abre bien tus oídos y déjate cautivar y agarrar por las maneras que apuntan estas canciones que están muy bien trabajadas y pensadas.
Es track list es como sigue
1. Never Give Up on You
Situando las cosas en su sitio y dando el pistoletazo de salida bien fuerte. Un tema muy directo con el estribillo cantado en el primer minuto. No digo más…
2. Tell Me Something
Esta canción es una de esas que te suenan bien desde el primer momento y que parece como si ya la hubieses escuchado antes. Perfectamente estructurada va llevándote de la mano con una base rítmica fácil que acomoda la entrada de los estribillos.
3. Say What You Want
La balada que hasta los tíos más duros tararean (aunque sea a escondidas). Aquí Dennis Ward se gusta y se viene arriba con unas estofadas cantadas en su gran mayoría a doble voz.
4. I Believe
Soltando lastre suavemente para no moverse mucho de la balada anterior. La canción es suave y comercial a más no poder. Una de las mejores del disco.
5. A Night to Remember
El paso ideal para tomar el nivel más duro del grupo. Los teclados mandando por encima del resto de los instrumentos, y una voz que cuenta y canta con liderazgo
6. She’s Got the Love
Otro puntazo bien dado. Sobresaliente en todos los sentidos.
7. Land of Golden Dreams
No tengo mucho que decir de un tema bastante normalito.
8. The Grand Design
El riff de guitarra del inicio ya lo he oído antes y seguro que tú también.
9. Streetlights
La segunda balada del disco. Esta es más lenta y para mi gusto bajará demasiado la tensión del oyente. Sin querer ser ofensivo me ha parecido una de esas canciones de la factoría Disney…
10. Who’s Fooling Who
El breve comienzo de los teclados marcan algo grande y así veo esta canción. El piano llevando en brazos la agradable voz de Dennis Ward. Subidón al disco con este tema.
11. Finally
La canción más hard rock del disco con unos teclados setenteros magníficos, que ponen el trabajo muy sencillo para que el resto del grupo haga fácilmente su labor. El estribillo es clásico a más no poder.
12. Where Is the Love
Esta es la tercera canción lenta… Pero no, no creas que es una balada al uso, es el baladón para cerrar el disco notablemente. Ahora con esto ya puedes reanimarte y ponerte de pie.
Resumiendo lo que he oído, puedo decir que el disco es bueno lo cojas por donde lo cojas. No será mi disco del año pero me parece un muy buen ejercicio de rock fino y selecto que puede tener cabida en cualquier momento en el que quieras disfrutar de voces cálidas, de melodías ricas y con buen sabor. El disco es muy variado y tiene sobre todo la exquisitez que da contar con un músico y productor como Dennis Ward. El hace y deshace a su gusto y lleva la batuta y el control de todas las canciones. Si esto es suficiente o no, eso será algo que debas decidir tú. Para ello escúchalo y saca tus conclusiones. Yo las he escrito. Ahora eres tú el que lo puedes hacer.
Luis Maria Catediano