FRONTIERS ROCK FESTIVAL 2017
Live Club, Trezzo sull’Adda (Italia), 29-30 Abril 2017
Crónica y fotos: Luis Catediano
Vaya cuerpo tenía el domingo al despertar… Las casi diez horas de conciertos en la sala Live Club son una prueba a superar y, aunque cansado, debo decir que estoy hecho un chaval. Dicen que cuando algo se hace con ganas, por mucho esfuerzo que suponga, esto se lleva mejor, y en este caso debo decir que más que un esfuerzo, la asistencia al primer día del festival fue un privilegio por las sensaciones y vibraciones recibidas. De este tipo de vivencias todas las que se puedan.
Después de un buen desayuno y de bastante descanso mañanero, prohibido cualquier otro día, lo que tocaba era dar comienzo a una nueva jornada de música en vivo. Nos esperaban otros siete conciertos de unos grupos muy apetecibles y abarcaban con sus diferentes estilos lo mejor que el sello Frontiers puede ofrecer actualmente. Así pues, y tras un corto desplazamiento en coche, llegábamos al lugar que habíamos abandonado hacía escasamente doce horas. De nuevo el negro como color más vestido y en las caras de los que allí llegábamos una sonrisa para exteriorizar el estado de ánimo tras la noche vivida.
Domingo 30-04-2017
Comenzaré a describir de la mejor manera que puedo lo que vivimos este pasado domingo en la segunda jornada del Frontiers Rock Festival 2017. Vamos allá !!!.
CRUZH
El disco con el que se presentaron Cruzh ante los seguidores melódicos este pasado año fue para mi gusto excepcional. Fue una recopilación de técnicas musicales que durante más de veinte años hemos ido escuchando y que llegaba unida a la juventud de sus componentes. Esto supuso para mí un atractivo más al recibir de buen gusto su disco puesto que ellos habían captado la esencia de aquellos Bon Jovi o Stage Dolls y la habían actualizado a nuestros días. Su trabajo de debut lo reseñé y lo califiqué como “uno de los discos del año”, así que mi interés por ver como lo defenderían en directo era máximo.
Puntuales como casi todas las bandas, los cinco jóvenes suecos posaron de espaldas al público en la oscuridad del escenario, para girarse en los primeros compases de su tema “In N’ Out of Love” y dar comienzo así a su concierto. La sorpresa para mí fue encontrar que el cantante Tony Andersson, que grabó el disco, era ahora el teclista y que la posición de frontman invitado estaba siendo ocupada por Philip Lindstrand, quien fue el guitarra que grabó con Find Me su segundo disco, y que en esta actuación lo hizo muy bien. El resto de componentes eran Dennis Butabi Borg al bajo, Anton Joensson a la guitarra y Mattias Silfver a la batería.
Enlazaron con el que fue uno de sus singles más pegadizos. “Aim for the Head” estaba sonando y muy bien en la sala y el poco público que en ese momento había dentro lo estaba festejando a gusto. En las primeras filas hubo unos cuantos banderines de la enseña Sueca que eran agitados para ánimo del grupo. Otro tema de los que más me gustaron cuando escuché el disco fue “Hard to Get”, el cual sirvió de saludo para la banda. Tocaron también “Stay” y “Anything for You” y para calmar metieron la baladita “Straight from My Heart”. Finalizaron su corta actuación con “First Cruzh” que también fue usado como single para adelanto del disco.
La opinión que saqué de Cruzh es que son muy jóvenes y que por lo tanto están empezando. Si el disco tuvo para mí mucho sentido, creo lógico decir que encima del escenario están aún verdes. Lo hacen bien, pero bien de verdad, aunque también es cierto que la experiencia que tienen es mínima y que practicando y tocando, esto se mejorará porque la base para tocar la tienen y es buena.
LIONVILLE
Uno de los grupos más finos y que mejor componen canciones dentro del estilo más melódico posible. Éstos son Lionville. Su primer disco nos sorprendió y maravilló a todos. Con el segundo siguieron el camino abierto y recientemente han editado su nuevo trabajo titulado “A World of Fools” que ha vuelto a conquistar a sus seguidores. Con estas palabras puedes imaginar que soy un ferviente seguidor de los italianos y que por esta razón su actuación era muy, pero que muy esperada por mí.
La alineación de Lionville sobre el escenario era la habitual con Stefano Leonetti como jefe a la guitarra y con Lars Safsund al micrófono. En la guitarra (también solista) estaba Michele Cusato, y en el bajo y la batería Giulio Dagnino y Martino Malacrida respectivamente. Dejo para el final al teclista Fabrizio Caria que con un sonido denso y limpio como pocos dió a Lionville un gran empaque. El show de los italianos comenzó con el “I Will Wait”·que es el tema que abre su nuevo disco. La aparición de Lars Sarsund fue vitoreada y aplaudida por los presentes, y es que este hombre se hace querer desde el primer instante. Es adorable y encantador a más no poder. Lleva la simpatía y los buenos modos por delante de cualquier gesto que hace. Si a todo esto le añadimos que canta de maravilla es que es el cantante que cualquier banda quisiera tener para con ello ganar al público por siempre.
Siguieron con “Here By My Side”, con “A World Of Fools“·y con “All We Need” para de este modo deleitarnos con una demostración musical que consiguió pillarme como pocos grupos melódicos han hecho anteriormente. El sonido y la fidelidad de sus interpretaciones son de lujo. La calidad que los músicos de Lionville tienen es enorme y es que basta con tomar un disco suyo y saber que la pureza de su sonido para luego compararlo con cómo estaban sonando esa tarde en el Live Club. Apoteósico de verdad. Continuaron con “Show Me The Love” y “No Turnin’ Back” y culminaron una genial actuación con tres maravillas tituladas “Power Of My Dreams”, “Bring Me Back Our Love” y la deliciosa “With You”.
Esta fue la manera en la que Lionville se ganó el respeto de una audiencia que asistió a las 16h a uno de los mejores conciertos del Frontiers 2017. Enhorabuena.
ADRENALINE RUSH
¿Por dónde empiezo esta pequeña crónica? … Vale vale que me centro…
Tras un pequeño descanso y con el gran sabor de boca por la actuación de Lionville, saltaron al escenario los suecos Adrenaline Rush, quienes formaban con la explosiva cantante Tave Wanning como principal mirada de todo el público masculino y también la de muchas féminas que analizaban de abajo a arriba sus evoluciones.
La salida fue rápida y a todo gas para dar al Frontiers un toque de heavy metal muy endulzado gráficamente. Interpretaron con mucha eficacia la veloz “Adrenaline” y “Love Like Poison”, ésta última lanzada como videoclip de su último disco “Soul Survivor”. Con la misma rapidez que habían tocado los dos primeros temas interpretaron la machacona “Shock Me” y la canción “Change”, que fue la que más sonó de su anterior y primer disco “Adrenaline Rush”. Hasta este momento todo había sido un huracán de sensaciones y es que la energía de este grupo está muy soportada por los estilosos y habilidosos guitarras Ludvig Turner y Alexander Hagman, quienes no dejaron de moverse con muy buenas artes mientras tocaban francamente bien sus instrumentos. Otro que está pluriempleado es el batería Marcus Johansson, quien había tocado la tarde anterior con Palace y a quien también vimos hace dos años con los Reach. La posición del bajista estaba ocupada por un fuerte Soufian Ma’Aoui.
“Generation Left Behind” y “Break the Silence” siguieron calentando al personal presente que me parece quedamos contentos por cómo lo estaban haciendo. Es evidente que la cantante estaba provocando miopías entre los varones y que también, hay que decirlo, ella se entrega y actúa con muchas ganas. No es solamente presencia, que evidentemente la tiene y mucha, sino que se sabe objetivo de las miradas y no cesa en querer dominar lo que ocurre sobre el escenario. Para dar por cerrada la actuación Adrenaline Rush interpretaron la acelerada “My Life”, a la que siguió “Sinner”, para finalizar con la rockera “Girls Gone Wild” como vivo reflejo de lo que Tave Wanning es.
Debo decir que acudía a su actuación bastante reticente pero al acabar la misma mi sensación había cambiado. El grupo defiende muy bien lo que hacen. Te puede gustar más o menos este estilo pero es justo decir que ellos lo hacen bien y que con las ganas que echan encima del escenario contagian a la audiencia.
KEE MARCELLO
Otro artista al que considero como esencial para entender el significado de guitarra solista de grupo de rock. Lo de este artista es como si piensas en la figura de un tobogán o mejor en la de una montaña rusa. Estuvo en lo más alto y también en una zona bastante olvidada por los enamorados y por la prensa que cubre el hard rock o rock melódico. Kee Marcello pertenece a esos músicos con una posición privilegiada en cualquier gusto de músico con mayúsculas. Es una pasada por cómo compone y por las ideas que saca de su cabeza y luego las interpreta en su guitarra. En bastantes ocasiones he expresado que este señor pone las notas más adecuadas en los momentos más precisos y esta habilidad es algo muy, pero que muy singular. Sabe juntar la melodía extrema con una agresividad que da a sus canciones ese punto de enorme de autenticidad.
Leyendo esto no pienses que voy a decir que su actuación fue buena, no. Simplemente diré que me dejó extasiado de gusto y con las emociones más profundas a flor de piel.
La banda que le acompaña es un compendio de juventud, de elegancia y de desvergonzada habilidad para demostrar que él no puede ir acompañado de cualquiera. El guitarra que comparte escenario con el maestro Marcello fue Jonny Scaramanga y este chico no se apartó ni amedrentó por tener a su lado al gran Kee Marcello. Para nada. Además de llevar las guitarras rítmicas muy bien y de moverse contantemente, él se lanzaba en solos que parecían a priori iban a ser tocados por Marcello. En el bajo estaba Ken Sandin (Swedish Erotica y Alien) y en la batería Darby Todd, quien demostró en una canción lo fácil que durante partes buscadas él iba largo tiempo fuera del compás principal y como se unía sencillamente al ritmo principal sin despeinarse. Me sorprendió mucho porque no le conocía de nada y su actuación fue enorme.
Lo único que no me gustó tanto fue la voz de Kee Marcello ya que está pobre en registro y canta demasiado ronco, pero bueno, ese fue el único pero a su actuación junto con el de que tocó cinco canciones de Europe cuando su show tuvo un total de once. No es crítica sino que pienso que con haber tocado dos canciones y haber evitado “Final Countdown” hubiese valido. Por lo demás su actuación me gustó mucho y me hizo sentir sus guitarras y las de Jonny Scaramanga muy profundas. Notable muy alto para el concierto de Kee Marcello.
Set List:
1. Soldier Down
2. More Than Meets the Eye (Europe)
3. Girl From Lebanon (Europe)
4. Scaling Up
5. Get on Top
6. Don’t Miss You Much
7. Tower’s Callin’ (Europe)
8. Black Hole Star
9. We Go Rocking (Easy Action)
10. Superstitious (Europe)
11. The Final Countdown (Europe)
UNRULY CHILD
Anda que haber pensado hace un año lo que ibamos a ver esta tarde en directo … Increible pero cierto. En nada iba a poder presenciar una actuación soñada muchas veces pero rápidamente olvidada por la gran dificultad que ello suponía por muchas razones. Unruly Child con Marcie Free al frente iban a tocar al completo el disco de debut que le encumbró en lo más alto en 1992. Vamos que el sueño estaba a punto de convertirse en algo sonora y visualmente tangible.
Las luces se apagaron y sobre el escenario los cuatro músicos que iban a dar durante una hora una lección de clase y elegancia tocando sus respectivos instrumentos. Allí estaban los originales miembros de Unruly Child, el guitarrista Bruce Gowdy y el teclas Guy Allison. Junto a ellos, Larry Antonino al bajo y Jay Schellen a la batería. La música empezó a sonar y a calentar al público que esperaba espectante pon donde podría aparecer Marcie Free. Al fin se dejó ver y fue entonces cuando el público que llenaba la sala gritó con alboroto para recibir a tan esperada figura. Allí estaba y tuve que frotarme los ojos para saber que definitivamente eso no era un sueño sino que estaba ocurriendo. Emocionado comencé a enfocar y buscar ese perfil y voz tantas veces admirado y muchas veces escuchado a oscuras como cierre de días cuando el AOR era algo que no encajaba si también te gustaban Iron Maiden o Metallica. Marcie Free empezó a entonar con la finura propia de una diva metida a cantante el porqué de su éxito hace más de veinte años. La forma de su voz no era la misma que en aquellos años o cuando grabó esa joya de disco con Signal, o aquel maravilloso “Long Way From Love” en solitario, es totalmente cierto, aunque la sola presencia de su figura sobre el escenario y oir esas doce canciones que conformaron el debut discográfico como Unruly Child merecía la pena por completo.
Fueron cayendo uno tras otro los temas de ese debut y en cada momento un sentimiento de alegría, añoranza y cariño recorría la sala y es que no era para menos. Las canciones de nuestra vida estaban saliendo a pocos metros por unos PA que sonaban perfectamente. El grupo estaba dando una lección de cómo tocar esas notas que difícilmente pasarán de moda nunca. Más abajo escribiré el set list pero así y a detalle diré que las baladas “To Be Your Everything“ y “Is It Over” me dejaron contento de sonidos melosos y lentos para mucho tiempo, porque será complicado que alguien haga canciones tan definitivas como son éstas. La exquisitez que Unruly Child consiguió esta noche de magia en la cuarta edición del Frontiers Rock Festival 2017 fue tal que me hubiese marchado al hotel muy contento tras su final de oro con “Who Cries Now”.
Set List:
1. Wind Me Up
2. Lay Down Your Arms
3. Take Me Down Nasty
4. Let’s Talk About Love
5. Is It Over
6. On the Rise
7. Long Hair Woman
8. Tunnel of Love
9. To Be Your Everything
10. Forever (del disco “Waiting for the sun”)
11. This Is Who I Am (del disco “Down the rabbit hole”)
12. When Love Is Gone
13. Who Cries Now
LA GUNS
La revolución elevada a la octava potencia. El desmadre del rock más sucio que movilizó a finales de los ochenta una escena en LA hacia unos sonidos desgarrados y rabiosamente adorables. Las cazadoras y pantalones de cuero negro vestidos con chulería desfasada por abusos de todos los tipos. El sleaze genuino de los inventores estaba a punto de tomar la noche italiana en el Frontiers 2017.
Mucha expectación porque desde el principio de la jornada los comentarios eran de que esta banda no pega para este tipo de festival, que van a estar tocando en una posición muy arriba del cartel y que bla bla bla. Todos los comentarios que pudimos estar intercambiando se iban a quedar en el olvido en poco más de una hora larga de actuación de los americanos de Los Angeles. La salida fue sencillamente matadora y para dejar noqueado a cualquiera por muy bien agarrado que estuviese. Sin concesiones tomaron el control de una actuación que fue desde un nivel 8 hasta el 10 conseguido al final de la misma. El K.O. fue en cuatro asaltos y los otros once sirvieron para rematar a un público exhausto, feliz y metido hasta dentro en una película en la que Traci Guns estaba interpretando el papel de rock star con su Gibson Les Paul y donde el cantante Phil Lewis se sentía como el dominador de los que abarrotábamos el Live Club. La estética de Tracii Guns era bastante dejada para lo que en un festival como el Frontiers se ve. Aquí abunda la laca y un estilo más “cuidado”, si cabe la expresión, y sin embargo allí estaba Tracii Guns quien parecía haber salido de un enclaustramiento libre de espuma de afeitar. Daba lo mismo. La música va más allá de la estética y este hombre demostró que el rock and roll corre por sus venas con la misma energía y garantía de satisfacción que hace treinta años. Memorable.
Como acompañantes estaban Michael Grant a la guitarra para arrasar con sus riffs a todo quien se pusiese por delante. Vaya manera de meter caña a una guitarra que después del concierto descansaría en su funda placenteramente por la paliza recibida. Otro artista, el bajista que más he viso arquear las piernas y que por lo tanto coreaba unos cuarenta centímetros más abajo que el resto del grupo. Enorme Johnny Martin quien acabo las dos últimas canciones del concierto tocando con dos bajos colgados, aunque para tranquilidad de todos, solamente tocaba con uno. La imagen era digna de ser presenciada. Detrás de la banda el batería Shane Fitzgibbon para quien cada canción era un sprint y una demostración de capacidad pulmonar y del manejo de los brazos y las piernas.
Hicieron un show completo. Un sobresaliente y consiguieron la victoria como he dicho antes por un contundente K.O. Ni puntos ni leches. LA Guns fueron los ganadores de la noche del Frontiers 2017 y salieron por la puerta grande con la admiración del público.
Set List:
1. No Mercy
2. Electric Gypsy
3. Killing Machine
4. Over the Edge
5. Bitch Is Back
6. Sex Action
7. Speed
8. One More Reason
9. Kiss My Love Goodbye
10. Don’t Look at Me That Way
11. Malaria
12. Never Enough
13. Jelly Jam
14. The Ballad of Jayne
15. Rip and Tear
TNT
El festival estaba llegando a su fin y la cara de cansancio quedaba expresada en el rostro de los asistentes. Todos en mayor o menor medida estábamos cansados. La actividad durante estos dos días de intenso festival había sido realmente fuerte, y a las 23h, que es cuando salió TNT, las fuerza empezaban a estar muy justas. Por otra parte, dame muchos fines de semana así y olvidémonos de otros más tranquilos. El rock and Roll se inventó para disfrutar y este fin de semana estaba teniendo mucha música.
Los noruegos TNT eran los encargados de cerrar la noche y la actuación iba a basarse en aquel famoso tercer disco de la banda titulado “Tell No Tales” que fue editado en 1987, y que colocó a la banda en una posición preferencial dentro de los gustos de los aficionados al “nuevo rock” que entraba poco a poco en nuestras casas. Supuso un éxito de ventas en USA y sin lugar a dudas un punto de referencia para muchos grupos. Los cantantes veían a Tony Harnell como el tipo capaz de subir al Everest vocalmente mientras cantaba suave y melódico. Los guitarristas miraban a Ronni LeTekro como el ejemplo a alcanzar por su rapidez en la mano derecha. La púa era inapreciable al ojo humano. Todo esto junto con unas acertadísimas composiciones llevaron a TNT a encabezar las preferencias de todos nosotros.
La salida del grupo fue bajo unas luces muy tenues que dejaban ver la delgada figura del guitarra noruego. Lo hicieron con “Give Me a Sign” y con la aparición del recuperado y bienvenido Tony Harnell quien regresó a la formación de nuevo. El lazo con LeTekro es muy fuerte y saben que mejor juntos para el éxito de TNT. Siguieron con la famosa “As Far as the Eye Can See” la cual enlazaron con “She Needs Me”. La banda tenía detrás a Diesel Dahl en la batería y eso, a pesar de una falta de comunicación al empezar este tercer tema, era una garantía ya que él es habitual en el grupo desde hace más de 15 años.
El sonido era muy bueno aunque el volumen del micrófono de Tony Harnell era excesivamente alto. Tanto que en momentos la voz del cantante me taladró el cerebro. Un poco más bajo por favor y más si quien canta es capaz de subir tan arriba con un fuerte falsete.
Mucho público había abandonado la sala y los que continuábamos allí sabíamos que el aguante físico era por una hora más y que era muy conveniente quedarse, porque no todos los días tienes a TNT enfrente tuyo. Retomaron con dos temas imprescindibles para la noche que fueron “Desperate Night” y la canción del disco “My Religion” “Invisible Noise”. Estuve toda la mañana siguiente con el riff de guitarra en mi cabeza. LeTekro es un virtuoso que se vale por sí mismo para inundar con su sonoridad la música del grupo. Había que calmar un poco y TNT interpretaron la hipnótoca y lenta “Child’s Play” para después quedarse LeTekro en un solo en una nueva demostración de maestria. A mi parecer esto bajó un poco el ánimo de la audiencia, que volvió a irse hacia arriba en sentimiento al escuchar la canción “Northern Lights”. Me encantó la emoción que puso Tonuy Harnell al cantar el que es uno de los temas más finos del grupo. A partir de este momento ya todo fue una fiesta, y es que sonaron “Tonight I’m Falling”, “Intuition” y “Seven Seas”.
El grupo abandonó el escenario para regresar para unos bises que fueron “Listen to Your Heart”, “10,000 Lovers (In One)” y “Everyone’s a Star”. Con esto la banda acabó su show y nosotros salimos contentos y con el riff de “Invisible Noise” en el cerebro. No fueron los mejores de la noche porque antes habían estado los LA Guns que repartieron cera en cantidades industriales. También Lionville hicieron un maravilloso concierto. Finos y elegantes los italianos.
Bueno, no me queda nada más por decir que en el Frontiers Rock Festival se pasa muy bien y que si Dios quiere estaremos de nuevo en 2018. Por mí no faltan ganas.
Luis Maria Catediano