ANATHEMA – A Sort of Homecoming (DVD 2015)

Anathema, tras unos años muy difíciles en el arranque de la primera década de este siglo que casi les llevaron a su disolución, han conseguido un merecido estatus que les permite llenar salas de medio/gran aforo desde que publicaran “We’re here because we’re here”, disco en el que empezaron a ofrecer una visión luminosa de su música. Tras este trabajo llegaron otros dos siguiendo la misma estela y fórmula, y aunque en la última ofrecían una pequeña vuelta de tuerca con dos temas más enfocados a una onda electrónica dentro de su propuesta ambiental, es posible que su apuesta actual haya llegado a un punto muerto al haber limitado sus repertorios casi a estos trabajos. Si bien hay fans que siguen recibiendo cada nuevo lanzamiento con los brazos abiertos, otros no lo ven del mismo modo. ¿Y a qué viene esto?, pues a cuento de la publicación de un directo de los que desnuda las canciones dejándolas en su formato más minimalista posible intentando no perder su esencia, “A Sort of Homecoming “, cuyos resultados no son del todo convincentes.

Contando de nuevo para la dirección con Lasee Hoile (habitual colaborador de Steven Wilson, tanto en solitario como con Porcupine Tree) y grabado en Liverpool (ciudad natal del grupo) durante una gira por catedrales del Reino Unido, no cabe duda de que el entorno en el que se desarrollaron los conciertos los convirtieron en una experiencia singular para todos los asistentes.

Pero lo que en una pequeña sala o escenario con la cercanía de la audiencia provoca una comunión especial e íntima con el grupo (como podemos atestiguar aquellos que hemos tenido la suerte de disfrutarlo así), un escenario tan amplio e imponente como en el de una catedral no consigue hacer traspasar la emoción a la pequeña pantalla. Hay momentos en los que la grabación transmite frialdad y lejanía, como si el grupo estuviera aislado y la audiencia simplemente observando desde lejos.

El repertorio elegido se ciñe casi en su totalidad a sus tres últimas obras, que persiguen crear un clima que va in crescendo hasta la explosión final y que aquí, con una presencia casi testimonial de la batería y la mayor parte del peso recayendo en las acústicas y loops que va creando Daniel Cavanagh, que sin duda es el que lleva la voz cantante, no funciona del todo. Basta escuchar “Thin air” y no dejar de esperar, sino más bien desear, que en cualquier momento haga acto de presencia toda la banda y eleve de verdad el tema al éxtasis que debería provocar, pero no, la sensación es más la de un coitus interruptus si se me permite la expresión. Otros temas que en estudio capturan un aura mágica con un tono calmado pero constante, como “Dreaming light”, aquí no ponen los pelos de punta. Y el que peor parado sale es el que cierra este directo, y único guiño a su material más antiguo, la tan potente como oscura “Fragile dreams” que deja indiferencia a su paso.

Lo que sería injusto no destacar como el mejor pro de esta aventura es la voz de Lee Douglas, que sí consigue brillar de verdad en números como “A natural disaster”, arropada por arreglos de cuerda que en este caso acentúan el dramatismo y desesperación que el tema necesita.

¿Qué deparará en el futuro una nueva entrega de Anathema?. Pues esperemos que algo diferente pero no centrado en esos guiños electrónicos de su último disco ya comentados al principio, ni algo como este acústico de resultados más bien fríos.

 

Albytor