RON KEEL BAND – Fight like a band (2019) review

El rockero de Georgia afincado en Dakota del Sur en torno a varios proyectos radiofónicos y musicales, acaba de publicar ‘Fight Like A Band’, con parte de su última banda (‘The Badlands House Band’) y dejando aparcado al grupo de toda su vida y que también lleva su nombre, los californianos KEEL.

Desde comienzos del nuevo milenio Ron había experimentado un cambio en su registro artístico, derivando del Metal USA que practicó con Yngwie Malmsteen en Steeler o con Keel, hacia el Rock Sureño de matiz Country de Iron Horse con los que publicaría un par de intensos discos y su álbum en solitario ‘Metal Cowboy’ de hace un par de años, super trabajado y con colaboraciones de lujo.

Con este nuevo proyecto como ‘Ron Keel Band’, reúne lo mejor de las dos facetas musicales por las que es medio popular, equilibrando un disco apasionado con mucho acento 80’s pero enfocado sobre manera vocalmente al Country y al Southern, con pinceladas más gruesas o sutiles de Hard Rock melódico e incluso AOR.

Qué canciones como ‘Road Ready’ o ‘Fight Like A Band’ no van a llegar a todas las emisoras de Radio es tan cierto como que esta reseña no se publicará en la ‘Rolling Stone’, pero puedes apostar por sus pegadizas y machaconas melodías para este próximo Verano, como también puedes jugártela por ‘RNR Guitar’ en la que hay tanto Heavy Rock americano del comercial como influencias de los 38 Special.

Las letras del álbum apelan a la diversión, el trabajo duro dentro y fuera del escenario, la unión espiritual y real entre banda y público, y los duros viajes de ciudad en ciudad. También tenemos citas a los tiempos de Keel con canciones como ‘The Right To Rock’, ‘No Pain No Gain’ o ‘Somebody’s Waiting’, cuyos títulos son introducidos en las estrofas de la inicial ‘Road Ready’.

Luego de un inicio tan potente como convencional, ‘Long Way Down’ pone la directa del Trailer que conforman las diez canciones para adentramos en los cortes más intensos y certeros del disco, alguno como el de la citada, sobresaliente musicalmente y emocionante en lo lírico, con un chorus, arreglos y demás, que recuerdan a los años dorados del género rockero, en los que reinaban Cinderella, Poison, Bon Jovi, o cualquiera de las encarnaciones de los hermanos Van Zant, tanto si son los Skynyrd, como 38 Special, Gary Rossington o las bandas de Johnny Van Zant.

La elegancia Hard-aorera de ‘Hearts Gone Wild’, el sureño 80’s vía ‘Good Songs Bad Times’, el Rock americano que muta en Heavy Rock heredado de los Aerosmith del ‘Permanent Vacation’ o los Mötley Crüe del ‘DR Feelgood’, triunfa cada vez que suena ‘Girls Like Me’, seguramente la canción mejor hecha del disco y con madera de single, aunque finalmente ‘Road Ready’ fue la elegida para esos menesteres y que cuenta hasta con video clip en la era en la que MTV ha dejado su sitio a ‘Youtube’.

Quizá los que siempre fuimos fans de KEEL (no más de tres en el estado español) echemos de menos a la vieja panda Heavy metalera comandada por Marc Ferrari, pero luego escuchas como se las gastan los forajidos que acompañan a Ron en el vigoroso Southern Heavy de ‘Fire In The Rain’ o ‘Just A Cowboy’, y caes en la cuenta de que posiblemente estamos ante la mejor colección de canciones grabadas por el rockero americano. Con rotundidad despide a golpe de ‘Old School’, que es de lo que va el disco, y precisamente eso es el añadido del mismo, cuatro canciones más, re grabaciones (quizá no necesarias) del legado de KEEL para iniciados si es que hay alguno.

Toño Caído