MOTHER ROAD: Drive (Road songs/Aor Heaven 2014)

La esencia del rock and blues ha sido muchas veces usada por diferentes bandas.Tomando como base el estilo de los setenta, éstas han deseado sonar de una forma cruda con lo más básico. Muchas ganas, guitarra, bajo y batería es el inicio de todo grupo, y si ya para colmo de todas las posibilidades, existe un teclista, ya tenemos el arranque listo para soñar.

Mother Road, que está compuesto por músicos resabidos, han hecho eso, lo más básico de la música para componer un disco de hard rock and blues en toda regla.
Esta aventura la forman el cantante Keith Slack (Steelhouse Lane, Michael Schenker), el guitarrista Chris Lyne (Soul Doctor), el bajista Frank Binke (Kingdom Come), el batería Zacky Tsoukas (Soul Doctor) y un archiconocido Alessandro DelVecchio.

Las influencias están muy claras desde el inicio del disco, donde todo lo relacionado con Led Zeppelin, Bad Company o Deep Purple va saliendo a flote. Vaya por delante que no copian. Mother Road lo hacen muy bien. It’s only rock…que tantas veces se dice. Además, en mi tierra hay un dicho que es que “el que a los suyos se parece, honra merece…”

La presentación con “The Sun Will Shine Again“, con el sonido Page en los primeros acordes y la manera de ser acompañado por la voz de Keith Slack delatan el gusto por Led Zeppelin. Esta es una constante en el álbum, pero para nada resta el sentido del disco. También el siguiente tema, “Feather In Your Hat”, rebosa sonido Deep Purple y Zeppeliano con un batería marcando fuertemente el bombo y los platos. Esos teclados “llorones” que inmortalizaron The Doors y que luego desarrollo hasta lo más alto Jon Lord suenan aquí de forma genial.

Los toques más blues vienen de la mano de “Drive Me Crazy” y “Out Of My Mind”. Dos medios tiempos bañados en el sonido de teclados que antes dije. Cantar y hablar de forma conjunta es lo que hace de manera magistral Keith Slack en estas canciones.

“These Shoes” es una preciosa canción basada en líneas de blues pero con momentos hard para subir las emociones al máximo. Contundencia musical y armonías vocales al puro estilo Ian Gillan. “Dangerous Highway” invita a un viaje por la Ruta 66 o la Mother Road, como la llaman en USA.  ¿Purple? Claro que sí. Todo un halago para cualquier fan de la música de los 70 con un Slack genial.

No menos atractiva se presenta “Poor Boy (Long Way Out)”. Es una canción fácil y con la presencia de un riff guitarrero que marca todo el rumbo del grupo. También en “Dirty Little Secret” manda la guitarra de Chris Lyne con unos repliques constantes a las frases del cantante. Se ve entre ellos un total y claro entendimiento.
Estilazo americano en el “Blue Eyes”. Una canción rica en el contenido vocal. Coros casi soul para sensibilizar al oyente hasta el terreno en el que el grupo se siente más cómodo que es sonando a blues.

Los dos últimos temas son incluso más puros si cabe. “Still Rainin” tiene las líneas de bajo típicas del sencillo rock and roll. El gran Alessandro DelVecchio con un teclado sonando a veces a piano, pero piano de los de antes, y otras veces a un clásico Hammond. Chris Lyne fantástico con su guitarra en constantes fraseos y solos.
Y para finalizar, el tema “On My Way” que bajo mi modesta opinión es un homenaje a los genuinos Black Crowes. Blues y más blues con la fuerza del hard rock para cerrar este notable disco.

No será un trabajo que pase a ser recordado como uno de los mejores del año. Quizás porque hay mucho donde elegir o sencillamente porque tampoco es un estilo de música que se preste a ello. It’s only Rock n roll… pero de muy buena calidad y con muchas emociones.

Luis Mª Catediano

2 Comments

  1. Lo que me pasa con este disco es que la producción es tan, tan mala que no he conseguido profundizar en él…

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