FM – Rockville I & II (2013)

¡Los palmeros del Hard Rock melódico están de enhorabuena! Pueden celebrar, por ejemplo, que Steve Overland sigue siendo un tío muy trabajador y que, a falta de un disco, ¡saque dos!
Las dos partes de este «Rockville» son más que suficientes, especialmente notable la primera, que desde luego hace bueno el título del álbum.

Han pasado una pila de años desde que Overland formase parte de los «Wildside» o de que rompiese incluso en la «MTV» con el vendido «Toug It Out».

Neil Kernon ya no es el productor a sueldo de la CBS, ni Desmond Child le susurra al oído a Steve Overland lo que debería hacer con tal o cual canción, esta o aquella melodía…

…Los años han pasado, y FM han grabado cuatro discos más hasta las dos partes de «Rockville«, destacando «Metropolis» (2010), un buen retorno tras quince años de parón seguramente forzado por la falta de interés en bandas como FM.

Encasquetados en la Serie B del Rock, que es lo que le ocurre al Rock melódico y al AOR en la actualidad, FM hacen justicia a su nombre con las once canciones que publican. Endurecidas lo justo en comparación con los anteriores trabajos, pero con ese sentido de la melodía que tiene Overland, que no es suyo únicamente, sino que el Rock británico lleva adherido a su ADN desde la aparición de Bad Company a mediados de los setenta.

De ahí que canciones como «Tough Love», «Wake Up The World» o «Only a Fool» recuerden a los dos Bad Co, los de Rodgers y los aoreros de Howe.

Incluso la bella balada «Story of My Life» preserva ese hálito tan típico de las baladas ochenteras, fuerza y entrega, y una melodía de piano que toma buena nota de la del «Dream On» de los Aerosmith.

Aunque el poso de todas las composiciones, rockeras o no, tienen un deje blues-rockero, FM no le hacen ascos al AOR (¡Estaría bueno!) en «Crave» o «Show Me The Way», dos buenas inyecciones a mayor gloria de este género para nostálgicos sin remedio (en la actualidad más que nunca)

Pero «Rockland» es el territorio idóneo para que la voz de Steve Overland siga impartiendo magisterio en temas potentes como «Better Late Than Never» o «Crosstrain Train», bien sea apoyado por la base rítmica de toda la vida con los FM (Merv Goldsworthy y Pete Jupp), su buen teclista Jem Davis o el cumplidor guitarrista Jim Kirkpatrick, que en la mencionada «Crosstrain Train» se explaya que da gusto, ¡y con buen gusto!

Que FM se lo curran bien, pero que muy bien, en la primera parte de «Rockville«, y aceptablemente en la segunda.

Caído en Little Big Horn