A NEW REVENGE – Enemies & lovers (2019) review

Una confidencia para empezar:
Mis gustos han cambiado. En general los discos de Hard Rock cada vez me aburren más. La mayoría de discos de las bandas con las que crecí me siguen gustando, pero las publicaciones de hoy en día no me dicen absolutamente nada en su gran mayoría. Y casi siempre lo intento. Escucho un par de canciones con mi mejor voluntad, pero no suelo pasar de ahí. Cada vez más son los discos de Heavy Metal, Metal Progresivo o incluso los sonidos más oscuros y extremos los que captan casi por completo atención.
Pero siempre hay alguna excepción. El año pasado me gustaron mucho los discos de Hardcore Superstar o Shiraz Lane, por ejemplo.
Pues bien. Este disco de A New Revenge es, contra todo pronóstico, la primera excepción de este 2019.

La Banda: A New Revenge
El guitarrista Keri Kelli (Alice Cooper, Pretty Boy Floyd, Night Ranger y un montón de proyectos más) y el batería James Kottak (miembro original de Kingdom Come y durante más de 15 años batería de Scorpions) se conocían desde hace años tras haber coincidido en giras con sus respectivas bandas. Planearon que algún día, cuando sus obligaciones se lo permitieran, iniciarían algún proyecto juntos. Ese fue el embrión inicial de A New Revenge. A ellos se unieron rápidamente otros dos “culos inquietos” del negocio musical: el bajista cubano Rudy Sarzo (Quiet Riot, Manic Eden, Ozzy, Dio…. casi nada) y el vocalista ex Judas Priest, Tim ‘Ripper’ Owens.
Con semejante bagaje musical, A New Revenge nació como un proyecto para tocar en vivo Jam Sessions con temas de todas las bandas con las que habían estado relacionados unos y otros. Supongo que era algo así como sacar provecho del impresionante curriculum de estos cuatro trotamundos. Material desde luego no les debía faltar.
Pronto surgió la inquietud de componer temas propios para plasmarlos en un disco y tras un par de años de trabajo estos días ve la luz este primer disco.

El Disco: Enemies & Lovers
Once canciones de Hard Rock compuestas por el binomio Kelli-Owens, con un aire moderno por una parte y un toque desenfadado y gamberrillo en algunos momentos puntuales, son los que componen este disco en su edición japonesa (que es la que yo estoy escuchando y comentando).
El disco se inicia con “A Distance Between”; una descarga de puro Hard Rock macarra y sleazy que nos servirá para entrar en calor rápidamente y de paso para descubrir que Tim ‘Ripper’ Owens puede cantar algo que no sea estrictamente Heavy Metal del de toda la vida sin desentonar demasiado.
Más festiva y al ritmo del cencerro de James Kottak suena “The Way”.
El toque moderno al que hacía mención antes se aprecia bien en “Never Let You Go”, que no deja de ser Hard Rock alegre y marchoso pero adornado con algunos efectos de producción en las voces sobretodo.
Los dos temas citados anteriormente se pueden ver en Youtube y es que han sido los escogidos para presentar el disco. Darles una escucha: evidentemente vale más una canción que mil palabras a la hora de definir el sonido de una banda. Veréis que en los videos el bajista no es Rudy Sarzo sino otro veteranísimo como Phil Soussan (Ozzy, Last In Line…). Parece ser que debido a problemas de agenda el primero no pudo grabar los videos y que a partir de ahora tanto uno como el otro van a repartirse las funciones de bajista en la banda en directo según marquen sus respectivas agendas.
Una de mis canciones favoritas del disco es “Glorious” que personalmente me recuerda a la primera época de Pretty Boy Floyd.
A partir del sexto tema “Fallen”, con su estribillo machacón, todas las canciones me gustan bastante.
Mención aparte creo que merecen “Only The Pretty Ones”, que es un clarísimo homenaje a Alice Cooper musical y líricamente, y “Here’s To Us”; una canción directa, con un toque más Heavy en las guitarras y con un estribillo que entra a la primera escucha.
Esta versión japonesa del disco se cierra con otros dos buenos temas: “Scars” y el bonus ”Killing You”, que contrariamente a lo que suele pasar con estos extras japoneses, esta vez es una canción con cara y ojos que encaja completamente con el resto de temas. Incluso diría que es una de las más chulas del Cd.

El resumen:
No me interpretéis mal. No estamos ante el disco del año. Ya dije al principio que este estilo musical cada vez me interesa menos, pero sí creo que es un álbum que merecería cierta atención por parte del público hardrockero.
Pese a que por los músicos que forman la banda podría parecer otro producto insulso más del estilo “junto a varios músicos relativamente conocidos y que se las apañen con esta colección de temas de dudosa calidad”, la verdad es que este trabajo tiene una personalidad propia y un sonido característico. Te gustará más o menos, pero no es otro producto clónico de los que suele publicar el sello Frontiers por ejemplo.
Son cuarenta minutos de canciones directas, cimentadas en las guitarras de Keri Kelli, la voz de ‘Riper’ Owens (que por fin ofrece un disco acorde con su reputación) y una producción bastante actual. No hay rodeos, ni florituras, ni unas letras demasiado profundas (ya me entendéis), pero el caso en que resulta bastante entretenido de escuchar.
Me temo que este será un disco que pasará completamente desapercibido, pero no puedo dejar de pensar que si estas canciones las publicaran unos tal Mötley Crüe no se hablaría de otra cosa.

Ya a la venta bajo el sello Golden Robot Records.

Alberto Lozano.
https://www.facebook.com/alberto.lozano.750

Tracklist:
1 – The Distance Between
2 – The Way
3 – Never Let You Go
4 – Glorious
5 – The Eyes
6 – Fallen
7 – Only The Pretty Ones
8 – Enemies & Lovers
9 – Here’s To Us”
10- Scars
11- Killing You (Japanese Bonus Track)

Line-up:
James Kottak – batería y coros
Rudy Sarzo – bajo y coros
Tim ‘Ripper’ Owens – voz solista
Keri Kelli – guitarra y coros